La propiedad de las Damas Apostólicas recurre al Supremo la protección total del Noviciado

La sociedad propietaria del Noviciado de las Damas Apostólicas, demolido parcialmente en junio de 2017 tras una cadena de negligencias, ha presentado ante el Tribunal Supremo un recurso de casación contra la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) del pasado 16 de enero, que establece la protección total de la parcela, ubicada en el paseo de la Habana, 198. Global Alchiba sostiene que la decisión de ampliar la catalogación de Bien de Interés Patrimonial (BIP) a los jardines este y norte es «contraria a derecho» por vulnerar la discrecionalidad técnica de las administraciones para blindar un inmueble y por considerar que mezcla los conceptos de Bien de Interés Patrimonial y Cultural. El recurso, fechado el pasado día 28, remite al blindaje dictado por el TSJM tras la petición de la Asociación de Defensa del Patrimonio de Chamartín de la Rosa. Los magistrados de la sala de lo Contencioso-Administrativo estimaron la necesidad de «preservar en lo posible la integridad del bien», basándose en sendos informes del Colegio Oficial de Arquitectos de Madrid (COAM) y una perito, que recomendaban extender la declaración de BIP de la Comunidad de Madrid para una parte del recinto. «No se trata de proteger en sí mismo el jardín o las huertas, sino de proteger el conjunto, puesto que el conjunto es lo que presenta interés como rememoranza histórica de la forma de vida que representaba», expone la sentencia. Argumentos La entidad, que planeaba levantar una residencia de estudiantes en este convento neomudéjar, original de 1919, argumenta que la sentencia crea inseguridad jurídica por varios motivos. El hecho de que el TSJM corrigiera la catalogación de la Comunidad podría contravenir –según el recurso– la discrecionalidad de la que disponen las administraciones públicas para determinar qué elementos deben protegerse, en tanto que los tribunales solo pueden hacerlo cuando exista arbitrariedad o falta de motivación. Así, arguye que el TSJM se extralimitó de sus funciones revisoras, habida cuenta de que «reemplaza el criterio técnico» del área de Patrimonio regional. Global Alchiba señala que la sala mezcla los conceptos de BIP y BIC, pues la alusión que hace del conjunto «no es propia» del primer término. En cualquier caso, la sociedad sostiene que el argumento de «rememoranza histórica de un estilo de vida» sentaría un precedente discrecional para cualaquier solar. Como ha venido informando ABC, la historia reciente del inmueble ha sido bastante convulsa, con el derribo de uno de los edificios y un laberinto de resoluciones y recursos. La piqueta entró en el covento por una sucesión de negligencias en junio de 2017. La propiedad comenzó las obras porque el edificio no estaba en el catálogo municipal, además de porque la tramitación no tuvo ninguna irregularidad. Tanto es así que la Audiencia Provincial de Madrid resolvió el pasado mes de diciembre que no había ninguna rregularidad. El promotor contaba con una declaración responsable, tramitada por la Agencia de Actividades del Consistorio, para demoler el bloque principal, la portería y unos almacenes.

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