Los indicios para una acusación por terrorismo contra los CDR

Documentación Tenían ya una lista de objetivos para atacar La causa judicial de los equipos de Respuesta Táctica (ERT) revela que el magistrado de la Audiencia Nacional Manuel García Castellón tiene en su poder una lista de objetivos de los ERT, entre los que se incluían edificios oficiales, como casas cuarteles de Barcelona, o el Parlament. Equipo de respuesta táctica Un grupo jeraquizado, creado y diseñado para golpear El juez de la Audiencia Nacional Manuel García Castellón encontró indicios de que los encarcelados en la operación Judas formaban parte de los ERT (los Equipos de Respuesta Táctica de los CDR), «una organización con una estructura jerarquizada que pretende instaurar la república catalana por cualquier vía, incluidas las violentas». El magistrado considera que «el ERT es una organización con capacidad suficiente como para llevar a cabo tácticas y maniobras con un alto nivel de profesionalización» y les acusa de los delitos de pertenencia a organización o grupo terrorista, tenencia de explosivos y conspiración para el delito de estragos. Para el juez existen indicios de que los siete arrestados forman parte de un Equipo de Respuesta Táctica (ERT), una organización con “una estructura jerarquizada que pretende. Los «legales» del secesionismo Tenían células «durmientes» dispuestas para ser activadas El llamado Equipo de Respuesta Táctica (ERT) desmantelado por la Guardia Cuvil contaba con células «durmientes» listas para ser activadas en cualquier momento. Incluso, se facilitó a sus miembros una serie de instrucciones entre las que estaba que llevaran una vida «normal» para no ser identificadosy garantizarse así la impunidad en las acciones que pudieran llevar a cabo. Asimismo tenían que «buscar objetivos» y aportar datos sobre ellos, al tiempo de que debían contar con la preparación suficiente para cometer los ataques. Es muy significativa la existencia de esas células «durmientes», porque se trata de una imitación del modelo de la banda terrorista ETA, que contaba con los comandos «legales» (no fichados) para los dos cometidos señalados: buscar objetivos y, en su caso, perpetrar los atentados. Manuales para fabricar bombas Se intervinieron sustancias precusoras de explosivos La célula de los CDR desmantelada por la Guardia Civil disponía de sustancias precusoras de explosivos y de manuales para fabricar bombas. De hecho, uno de los detenidos resultó herido mientras hacía pruebas para fabricar artefactos. Los manuales, algunos manuscritos, eran, además, muy precisos. Lucha callejera Algaradas bien organizadas en el «frente de masas» Los sucesos de Cataluña son, también, indicio de que estamos ante el embrión de una banda terrorista. Las algaradas, según Interior, estuvieron perfectamente organizadas y Elisenda Paluzie, de ANC, las alabó porque mostraban en el exterior la realidad de esa comunidad. La lucha callejera (kale borroka en el País Vasco), es la expresión en la calle del «frente de masas».

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