«El puente de Vallecas es una barrera económica, social y política», rezan varios carteles pegados en las columnas del paso elevado. Y razón, a tenor de los datos y la percepción general a un lado y otro del puente, no les falta. La renta media se reduce casi a la mitad nada más salir de la M-30, que separa en este punto los distritos de Retiro y Puente de Vallecas. Pero no solo eso. Según Idealista, el precio de la vivienda por metro cuadrado en el barrio de Adelfas alcanzó en marzo los 4.307 euros, muy cerca de su máximo histórico, en mayo de 2019, cuando se elevaba hasta los 4.353 euros. Unas cifras que en apenas cien metros (la distancia que separa a las primeras casas de cada distrito) se reducen sustancialmente. En Numancia, el precio por metro cuadrado se sitúa en 2.088 euros, con un descenso significativo del 26,2% desde que en octubre de 2008 su valor tocara techo en 2.830 euros. Y en San Diego, el valor baja a 1.984 euros por metro cuadrado, muy lejos de los 3.143 euros que se pagaban en abril de 2008. Otro de los carteles que ‘luce’ los bajos del puente advierte de la posible especulación que traería consigo el derribo del puente: «Será el suelo dorado de urbanistas, especuladores y gobernantes locales». Sea como fuere, lo cierto es que las diferencias también afectan a la usurpación, con un número importante de casas okupadas en los dos barrios vallecanos. El fenómeno, en cambio, resulta mucho menos significativo en Retiro. La falta de zonas verdes también emerge como un punto clave a la hora de abordar las diferencias. Mientras Numancia y San Diego son barrios del casco antiguo de Vallecas que están repletos de edificios y casi no cuentan con parques en sus vastos territorios, Adelfas mantiene un pequeño corredor de jardines en paralelo a la M-30 que hace menos agresiva su limitación.De España https://ift.tt/4LpFKPy
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