Los 129 pueblos de Madrid que pagarán menos por el abono transportes a partir del 1 de enero

Arropada por cerca de un centenar de alcaldes y concejales de las localidades madrileñas más alejadas de la capital, la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, presentó ayer la rebaja que el Gobierno regional aplicará en el precio del abono transportes de las zonas C1 y C2 a partir del próximo 1 de enero. La medida, uno de los compromisos que anunció la lideresa durante su debate de investidura, beneficiará a más de 500.000 potenciales viajeros de 129 municipios. Los usuarios con las zonas tarifarias C1 y C2 se ahorrarán hasta 200 euros anuales, a igualarse el precio a la zona B3. De este modo, los más de 30.000 pasajeros actuales de estas dos áreas, que hasta la fecha abonan en sus recargas mensuales de la Tarjeta 89,50 euros en la C1 y 99,30 euros en la C2, pasarán a desembolsar 82 euros. «Esta unificación de tarifas es un paso más para acortar distancias en la región. Llegar a la Puerta del Sol costará exactamente lo mismo para los usuarios de abono transporte desde Rascafría que, por ejemplo, desde Villanueva de la Cañada», subrayó la presidenta popular en el acto celebrado en la Real Casa de Correos. El abono de la zona C1 abarca hasta 40 localidades, entre ellas, Morata de Tajuña, Chinchón, Aranjuez, El Escorial, Soto del Real o Valdetorres del Jarama. Mientras que el de la C2 engloba a 89 localidades, las más lejanas, como Navacerrada, Buitrago de Lozoya, Pelayos de la Presa , Cercedilla o Somosierra. La Tarjeta de Transporte Público (TTP), como así se denomina oficialmente, permite moverse por las zonas interiores a la abonada, es decir, si un viajero ostenta un pase C2 podrá desplazarse por las áreas A, B1, B2, B3 y C1. Las únicas excepciones son los abonos interzonales B1-B2, B2-B3, B3-C1 y C1-C2, que solo son válidos en las zonas a las que se refiere el título. En la Comunidad hay casi 20 millones de TTP, de las que 4,4 millones son personales, siendo una de las regiones europeas con la tarificación más asequible, por delante de Londres o Berlín y equiparada a París. Cabe recordar, además, que al finalizar el presente año la Comunidad de Madrid (a través del Consorcio Regional de Transportes) habrá subvencionado al usuario de transporte público hasta el 60% de su coste total, con una inyección de 1.500 millones de euros a Metro, Metro Ligero, EMT, autobuses urbanos e interurbanos y red de intercambiadores. El plan de Ayuso es seguir con «la política de rebajas en diferentes títulos de transportes», con descuentos a niños, tercera edad y los colectivos más vulnerables.

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