La Autoridad Portuaria de Valencia (APV) amplió el pasado año su brecha de tráfico respecto al puerto de Barcelona en plena ofensiva de formaciones independentistas como ERC para frenar sus planes de expansión. Los enclaves de Valencia, Sagunto y Gandía resistieron el impacto de la crisis sanitaria del coronavirus y cerraron el ejercicio con un movimiento de 80,6 millones de toneladas. Un volumen de tráfico similar al de 2019 que constrasta con el descenso del 8,65 por ciento del conjunto de instalaciones de Puertos del Estado y del doce por ciento en el caso de Barcelona. De esa forma, según los datos proporcionados por el Ministerio de Transportes, el tráfico de la Autoridad Portuaria de Valencia supera en más de veintiún millones de toneladas al de Barcelona, su histórico competidor en el arco mediterráneo español. La Autoridad Portuaria de Valencia pretende apuntalar con el proyecto su liderazgo en España en cuanto a tráfico de contenedores En este contexto, y mientras el puerto de Barcelona ejecuta la ampliación de su principal terminal, Esquerra Republicana de Catalunya trata de frenar los planes de crecimiento de la Autoridad Portuaria de Valencia. La formación independentista no cuenta con representación parlamentaria en la Comunidad Valenciana, donde en las últimas elecciones generales obtuvo el 0,23 por ciento de los votos a través de las siglas de ERPV. Sin embargo, el grupo de ERC en el Congreso ha tramitado en los últimos meses iniciativas en las que reclama al Ministerio de Fomento, dirigido por el socialista y valenciano José Luis Ábalos, la «suspensión cautelar» del proyecto para la construcción de una nueva terminal de contenedores de la Autoridad Portuaria de Valencia. La formación separatista reclama un nuevo estudio de impacto ambiental, entre otros argumentos para frenar el proyecto. Los diputados de ERC también piden paralizar la Zona de Actividades Logísticas (ZAL) de la capital del Turia. Generación de empleo y riqueza Un estudio liderado por el catedrático de Puertos y Costas Vicent Esteban calculca que la nueva terminal de Valencia genería las creación de 6.000 puestos de trabajo y una riqueza de seiscientos millones de euros en términos de Valor Añadido Bruto (VAB). La Autoridad Portuaria de Valencia pretende apuntalar con el proyecto su liderazgo en España en cuanto a tráfico de contenedores, que el pasado año se elevó hasta los 5,4 millones frente a los 5,1 de Algeciras o los 2,9 de Barcelona. Al respecto, desde las filas del PP y de Ciudadanos se denuncia que «hartos y cansados de las intromisiones de los independentistas catalanes, que quieren que el puerto de Valencia no supere al de Barcelona». Para los partidos de la oposición en la capital del Turia las iniciativas parlamentarias de ERC suponen una «injerencia que demuestra que el debate no es medioambientalista, ni de sostenibilidad, es un asunto de productividad, de competitividad y de crecimiento de las exportaciones y, por tanto, del desarrollo de nuestras empresas y nuestro PIB». La formación independentista también ha formulado recientemente una nueva batería de preguntas al Gobierno con motivo de la licitación de un nuevo estudio del trazado ferroviario entre Sagunto y Teruel, una pequeña parte del Corredor Cantábrico-Mediterráneo, que posibilitaría el transporte de mercancías de Aragón al puerto valenciano en detrimento del de Barcelona. Al respecto, la federación comarcal de ERPV advierte de que sigue «vigilando para que la afección de los espacios naturales protegidos de la Red Natura 2000 no sea malograda por este nuevo proyecto».De España https://ift.tt/3pBH8YD
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