Después de una semana de reconocimientos y presentaciones en Maranello, de muchas reuniones y tomas de contacto en la factoría roja, Carlos Sainz pilotó al fin un Ferrari. Fue el coche de 2018, el que llevaban Vettel y Raikkonen, se supone que con algún elemento del nuevo bólido que conducirá los próximos meses. Su primer día en el Ferrari se completó de 10 a 17 en el circuito anexo de Fiorano, puerta con puerta con la fábrica del cavallino. Sainz tenía muchísimas ganas de de subirse al monoplaza rotulado con su número (el 55), cuentan sus allegados. Quería disfrutar del momento, pues solo dos españoles antes habían tripulado un Ferrari como pilotos titulares (Alfonso de Portago, en 1956, y Fernando... Ver MásDe Deportes https://ift.tt/3iSN3Ga
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