Majadahonda, último municipio que suspende sus fiestas por la quinta ola

No habrá, por segundo año consecutivo, banderines que adornen las calles de la Comunidad de Madrid, puestos callejeros de garrapiñadas, verbenas ni comparsas en la mayoría de pueblos de la región, cuyas fiestas se apagan antes de empezar debido a los datos de contagios registrados en la quinta ola. Majadahonda es el último municipio que se une a la ristra de localidades que han cancelado las fiestas patronales, siguiendo los pasos de Pozuelo de Alarcón, Pinto, Ciempozuelos, Arganda del Rey, San Lorenzo de El Escorial y Boadilla del Monte. El Ayuntamiento majariego anunció ayer la decisión de suspender los festejos en honor al Cristo de los Remedios, previstos para septiembre, tras reunirse con las peñas y hermandades para valorar su viabilidad, con una incidencia actual de 770,6 casos por cada 100.000 habitantes. Los conciertos, actividades e iniciativas como el concurso de tapas tampoco se llevarán a cabo, y la Policía Local será la encargada de velar por que se cumplan las restricciones a través de un dispositivo especial para prevenir botellones y fiestas clandestinas. «Las nuevas variantes del virus están haciendo que suba la incidencia en toda España, por lo que debemos ser muy precavidos. Ojalá el año que viene podamos celebrar las fiestas como siempre las hemos vivido los majariegos», explicó el alcalde, José Luis Álvarez Ustarroz. En Arganda también se decidió ayer cancelar la conmemoración de los actos programados en honor a San Roque que se celebrarían entre el 13 y el 16 de agosto, aunque sí habrá una misa en honor al santo en la iglesia San Juan Bautista. En el aire han quedado las fiestas patronales de la Virgen de la Soledad, decisión que se tomará la próxima semana. Por su parte, Ciempozuelos, Pozuelo y Pinto han suspendido definitivamente las verbenas que se desarrollarían en septiembre con el objetivo de evitar las aglomeraciones. Boadilla del Monte ha hecho lo mismo pero más a largo plazo, ya que tendrían lugar en octubre en honor a la Virgen del Rosario. En el aire están los encierros de San Sebastián de los Reyes, a la espera del visto bueno de la Comunidad de Madrid. La Consejería de Sanidad notificó ayer 4.118 nuevos contagios (3.226 en las últimas 24 horas) y 21 fallecidos, la cifra más alta desde el 13 de mayo, cuando se registró el mismo número de víctimas mortales en hospitales. El dato de hospitalizados continúa al alza, con 1.465 pacientes en planta y 296 en UCI. La incidencia acumulada, además, es de 725,69 casos por cada 100.000 personas, disparada hasta los 2.011,9 en la franja de 15 a 24 años.

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