El accidente de Miguel Oliveira, velocísima caída y por suerte sin consecuencias demasiado graves, fue el detonante para que pilotos y dirección de carrera optaran por mirara seguridad antes que las motos. Las fortísimas rachas de viento hacían impracticable la conducción y peligroso el trazado. El portugués, que dejó la pista con el casco destrozado y magulladuras de diversa consideración, ejemplificó las difìciles condiciones de un Gran Premio de Australia que veía volar números de pizarra, banderas y demás artículos además de las motos. La Comisión de Seguridad llamó a todos los pilotos en cuanto de sacó la bandera roja debido a los diferentes objetos que cayeron a la pista para decidir si continuar o no. De los 22 pilotos de MotoGP, 19 decidieron que era impracticable y peligroso seguir en esa situación sobre todo teniendo en cuenta que se iban a jugar la formación de la parrilla. Solo 3 pensaron que, aunque al límite, se podía pilotar. Así, con la decisión de la mayoría, Dirección de Carrera suspendió la jornada, y después de unos minutos de incertidumbre sobre si la parrilla se formaría con los últimos entrenamientos cronometrados, se fijó una sesión de clasificación para el domingo justo antes de la carrera y después del warm up (vueltas de calentamiento). Por el momento, los números registraban a un Maverick Viñales muy fino en primera posición, por delante de Andrea Dovizioso, Cal Crutchlow, Danilo Petrucci y Jack Miller. Marc Márquez solo pudo terminar en sexta posición. En Moto2 y Moto3 sí se pudo completar la ronda de clasificación. En la categoría pequeña Marcos Ramírez saldrá primero. Y en la mediana lo hará Jorge Navarro, con Álex Márquez en sexta posición y dispuesto a hacer todo lo posible por sumar 14 puntos más que Thomas Luthi para ser campeón.De Deportes https://ift.tt/31Nk1h5
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