Modric de falso nueve, Valverde con Casemiro de doble pivote, Kroos a caballo entre en el centro del campo y la ayuda a Luka en presión alta... el pifostio táctico que montó Carlo Ancelotti en el primer tiempo del clásico no le pasará factura material porque la Liga la tiene en el bolsillo, pero hará sonar el botón de alarma si en el futuro repite un numerito parecido al de anoche que le costó un histórico meneo del Barça y unas sensaciones preocupantes de cara a lo que está por venir, que no es otra cosa que una complicada eliminatoria de Champions contra el Chelsea. Ancelotti decidió sustituir al lesionado Benzema colocando al futbolista más talentoso en su lugar, error que tardó cuarenta minutos en corregir, justo en el córner del 0-2 de Araujo. Ver a Modric encimar a Ter Stegen, mientras el Barcelona hacía todo tipos de rondos en el centro del campo, fue un clavo en el ojo del aficionado madridista. Esa pieza provocó un absoluto desorden en todas las líneas blancas, hasta el punto de generar confusión hasta en los dos jugadores más fiables esta temporada, Militao y Alaba. Brasileño y austríaco fueron superados ayer en velocidad y por alto, dos de sus mejores virtudes. Tras el descanso, Ancelotti lo estropeó todavía más retirando a Carvajal y Kroos e introduciendo en su lugar a Camavinga y Mariano. Un doble cambio con otra novedad táctica. Defensa de tres con Nacho, Militao y Alaba que tardó dos minutos en explotar con un mano a mano que echó fuera Ferran, y con el 0-3 del propio Torres. La solución, vuelta a la defensa de cuatro, con Casemiro, cuya mejor virtud no es la rapidez, de central. 0-4. El desastre fue de época.De Deportes https://ift.tt/NsIj6FD
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