viernes, 18 de marzo de 2022

La conexión de la M-203 con la R-3 resucita este otoño tras 17 años

Durante años, y años, los vecinos de Mejorada del Campo y toda la zona han podido pasear y montar en bici por lo que quedaba de las obras de una carretera de peaje que nunca llegó a ver la luz: la MP-203. Esta vía nació como proyecto en tiempos de la presidenta Esperanza Aguirre, en 2005, para conectar con la R-3 por un extremo y la A-2 por el otro, y facilitar el tránsito en el corredor del Henares. Pero las obras nunca se terminaron, y aquellos futuros carriles quedaron en vía muerta. Hasta ahora: la Consejería de Transportes tiene planes para reactivar el proyecto -que ya no será de peaje- a partir de este otoño. La historia de esta carretera MP-203 es rocambolesca. Se sacó a concurso la concesión para la construcción sin financiación pública y la posterior explotación por 30 años de esta autopista, que iba a ser de peaje y por la que podrían pasar, calculaban, hasta 2,7 millones de coches. Iba a ser, decían los responsables políticos, una infraestructura con coste cero para los ciudadanos. Pero la realidad se empeñó en desmentirlo. De hecho, el concurso se falló y la obra fue adjudicada a Cintra, filial de Ferrovial, que comenzó las obras y las estuvo desarrollando a buen ritmo durante años, hasta terminar en torno al 70 por ciento de la tarea. Obstáculos Pero chocó con un obstáculo que resultó insalvable: el Ministerio de Fomento de entonces no dio permiso para el enlace con la R-3; el concesionario que entonces tenía esta radial de peaje no estaba de acuerdo con esta conexión. Y la obra, sin ella, no tenía ningún sentido. Resultado: en esas condiciones, Cintra renunció a continuar pero pidió a la administración que le compensara por los más de 60 millones de euros gastados en las obras. Varios litigios judiciales más tarde, y con la Justicia dándole la razón a la empresa, el Gobierno regional tuvo que devolver ese dinero, con intereses, a Cintra. Algo que, según fuentes de la actual Consejería de Transportes, se hizo el pasado mes de diciembre. La carretera fantasma se quedó allí, sin uso y sin futuro a la vista. Hasta ahora, cuando el Gobierno regional ha decidido rescatar este proyecto y volver a darle vida. Recuperar la idea La idea del consejero de Transportes, David Pérez, es continuar con el proyecto para conectar la M-203 con la A-2 por un lado y con la R-3 por el otro. Para ello, se invertirán 60 millones de euros, en unos trabajos que se prolongarán durante unos 48 meses. Aunque el proyecto aún tiene que redactarse, se plantea construir dos nuevos carriles por sentido, y un nuevo enlace en el Polígono Industrial de Mejorada del Campo, que saldrá de una de las playas de peaje que se hicieron en su día, en el proyecto que quedó colgado. Esto permitirá descargar la conexión de la R-3 con la M-208. Con los datos con que se cuentan hasta la fecha, se propone licitar, a lo largo del segundo semestre de este año, el proyecto para la terminación de las obras para adecuar la carretera MP-203, y poder abrirla a la circulación de vehículos. La inversión prevista para la finalización de las obras es de 60 millones de euros y tendrá un plazo de ejecución superior a 48 meses. Hasta llegar a esta decisión, han hecho falta muchos meses de trabajo, reuniones y puestas en común entre las administraciones afectadas: la carretera objeto de la obra es de ámbito regional, pero tanto la R-3 como la A-2 son de competencia del Gobierno central. Después de 14 meses de reuniones, el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana autorizó a la Consejería a conectar la vía con la R-3 y la A-2 Según explican en la Consejería de David Pérez, a finales del año pasado, después de 14 meses de reuniones, el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana autorizó a la Dirección General de Carreteras de la Consejería de Transportes e Infraestructuras «los condicionantes que debe recoger el nuevo proyecto que permita conectar la M-203 con la autovía estatal A2 y con la autopista R-3». Hace falta ahora redactar el proyecto de construcción para finalizar las obras de la autovía M-203, que tendrá dos carriles por sentido y la posibilidad de ampliar a un tercero, además de todos los elementos necesarios para su puesta en servicio. Entre ellos, se incluyen enlaces, pasos superiores e inferiores, desvíos de servicios, actuaciones medioambientales, instalaciones y «las expropiaciones y ocupaciones temporales necesarias», a lo largo de una longitud aproximada de 12,2 kilómetros. Diversificar tráficos Este plan y las futuras obras que se liciten posteriormente permitirán, añaden en la Consejería de Transportes, «la puesta en servicio de un eje de alta capacidad conformado por la nueva autovía M-203, desde su enlace con la A-2 hasta su enlace con la R-3», conformando «un arco que faculte diversificar los tráficos de entrada a Madrid por el este y ofrecer distintas soluciones de acceso a los usuarios de la zona del corredor del Henares y a los usuarios de las carreteras autonómicas colindantes M-208, M-206, M- 300». En los presupuestos de 2022 aparece una partida de 500.000 euros consignada para abordar la redacción del proyecto de terminación de estas obras.

De España https://ift.tt/FGxrsNP

0 comentarios:

Publicar un comentario