De forma presencial y para todos los alumnos de Infantil y Primaria a la vez –con los turnos de acceso que establezca cada centro– desde el 9 de septiembre y a partir del 14 para ESO, Bachillerato y Formación Profesional. Así comenzará el próximo curso escolar en Castilla y León, que descarta un arranque del periodo lectivo de forma escalonada –como sí ha avanzado la Comunidad de Madrid– y apuesta por la asistencia al aula como «la mejor manera de garantizar el derecho a la educación» y siendo «conscientes de que el riesgo cero no existe, ni en estos momentos ni en cualquier faceta de la vida», según ha destacado este miércoles el presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, en la presentación de los detalles del periodo académico que ha de arrancar en breve marcado por el Covid-19. Con un «mensaje de tranquilidad y confianza» al conjunto de la comunidad educativa, desde profesores a alumnos y pasando también por las familias, Mañueco ha defendido que «en Castilla y León estamos preparados para iniciar el curso». «Es un tren que no se va a parar», ha recalcado el jefe del Ejecutivo autonómico, quien ha avanzado que están en disposición de poder volver a la enseñanza telemática si fuera necesario, pero por ahora es una vía por la que no se contempla circular, salvo para casos concretos, como alumnos que no puedan asistir al centro. 1) Mascarillas y grupos «burbuja» El 2020-2021 será el curso escolar de las mascarillas, la distancia social y las mayores medidas de higiene y limpieza. En el IESO de la localidad vallisoletana de Arroyo de la Encomienda donde Mañueco ha desgranado las novedades el periodo lectivo ya tienen marcas en el suelo para indicar las direcciones, dispensadores de hidroalcohol a la entrada de las aulas y papeleras con pedal, así como un aula de aislamiento en caso de detectarse durante la jornada lectiva un sospechoso. Es lo que imperará en el próximo periodo, en el que los escolares de Infantil y Primero de Primaria –hasta 6 años– formarán grupos «burbuja» y «estables de convivencia» que no se relacionarán en ningún momento con el resto. Son los únicos que estarán exentos de llevar mascarilla, pues para los demás será obligatoria tanto en las aulas como en el transporte y la deambulación por el colegio o instituto. La Junta se las facilitará a los docentes y también habrá disponibles para aquellos alumnos que las necesiten porque se les deteriore, la pierdan, rompa... 2) Distancia de 1,5 metros En las clases, distancia de 1,5 metros al menos entre pupitres y ratios de alumnos más reducidas: 22 como máximo para Infantil y Primero de Primaria, y 25 de Segundo a Sexto de Primaria y en las que no se superen los 50 metros cuadrados, siempre se que mantenga el 1,5 metros de separación, que también ha de regir en otros espacios como el comedor. 3) Por la tarde No en todos los centros será posible mantener ese máximo de alumnos y garantizar la distancia, por lo que ya se asume que habrá clases por la tarde. En principio sólo en Bachillerato. 4) Sin extraescolares Lo que no habrá, al menos durante el primer trimestre, son actividades extraescolares en los propios centros, pues «consideramos que no es lo adecuado aquello no estrictamente obligatorio» a tenor de la situación actual de la pandemia. 5) Ventilación «Adecuada» ventilación, obligada entre clase y clase, así como mayor vigilancia en los recreos y aseos y un aumento de la limpieza y desinfección para lo que se destinarán 200 empleados de la Junta, que también pondrá en marcha una línea de apoyo y ayuda a las administraciones locales, pues de ellas depende este cometido en la educación obligatoria. 6) Turnos de recreo y para ir al baño Los centros –hay 1.300 en Castilla yLeón, con 14.000 aulas– deberán establecer los horarios escalonados de entrada y salida así como los recreos, de modo que se acabó el tiempo de receso a la misma hora para todos y también la aglomeración en los aseos, que se deberán usar por turnos. En los próximos días deberán publicarlo en sus páginas web para que profesores, familias y alumnos «tengan conocimiento de qué hacer». 7) Coordinador Covid Los centros contarán con un coordinador Covid, encargado de organizar y aplicar todo el dispositivo, así como los protocolos para los servicios complementarios como comedor, transporte o los programas que amplían la jornada (Madrugadores y Tardes en el cole), que sí se mantendrán. Será alguien del cuerpo docente, a quien se le descargará de tarea lectiva. Además cada centro tendrá asignada una persona de referencia en el ámbito sanitario «para el seguimiento y control de los casos sospechosos». 8) Equipos «Covid-colegios» Y se pondrán en marcha los llamados equipos «Covid-colegios» que serán los encargados de realizar las pruebas de detección del virus (PCR) a quienes tengan síntomas. Lo harán en la casa –donde debe permanecer aislado hasta conocer el resultado– o en el propio centro, en función del horario, y en un máximo de 36 horas. Coordinados «perfectamente» con Atención Primaria se busca así evitar la saturación de los centros de salud y hospitales. Se prevé firmar un acuerdo con las cuatro universidades públicas para que analicen esas muestras. 9) Digitalización Un conjunto de medidas con las que mandar «un mensaje de tranquilidad y confianza» y también de «corresponsabilidad» de las familias, ha reiterado. Eso sí, «no es una decisión rígida y vamos ser flexibles», por lo que se irán analizando y adaptando en función de «la evolución de la pandemia», ha reiterado Mañueco. «Tenemos preparadas todas las alternativas» para cuantas circunstancias se puedan producir en función de la evolución de la pandemia del Covid-19. El curso arrancará con conexión «ultrarrápida» a internet en todos los centros, que tendrán aulas virtuales y Educación dispondrá de 10.000 dispositivos digitales para ofrecer a las familias con dificultades económicas y prevé ampliar a 17.000 las tabletas del convenio con el Ministerio y Red.es. 10) 800 profesores más Poner en marcha el nuevo curso «requiere un esfuerzo importante». De momento, 75 millones de euros más que otros años y 800 profesores a mayores (600 para la educación pública y 200 para la concertada). «Son los necesarios. Si fueran necesarios más, dotaremos de más recursos», señaló el presidente de la Junta,
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