Comienza el estirón diagonal de la línea 11 de Metro que duplicará sus paradas

La línea 11 de Metro nació en 1998 y se estira en 2022. Hay una inversión gigantesca detrás de las obras que han arrancado esta misma semana: 500 millones de euros, 33 kilómetros más y casi el doble de paradas para vertebrar Madrid de suroeste a noreste con un nuevo eje de movilidad. Una macroestructura que el Gobierno de la Comunidad de Madrid prevé completar para 2027 . Los trabajos se dividen en tres fases y la primera de ellas, ya iniciada y que culminará a finales de 2024, conectará Plaza Elíptica y Conde de Casal. El director general de Infraestructuras, Miguel Núñez, ya apuntaba a principios de octubre que la ampliación de la línea 11 empezaría el 1 de noviembre. Esta primera etapa añadirá 6,9 kilómetros de túneles subterráneos, dos estaciones y nuevas conexiones a la red. El trazado partirá de Plaza Elíptica , continuará en la nueva parada del parque de Comillas, cruzará el río Manzanares para establecer la estación de Madrid Río —al principio, un reto por la cantidad de infraestructuras de la zona, por lo que estará casi «encajada» en la acera del paseo de las Yeserías—, se alineará con la parada de Palos de la Frontera, después circulará por debajo de Atocha, donde también dará el alto, y rematará el trayecto en Conde de Casal. Estas tres últimas estaciones servirán a la línea 11 de enlace con las líneas 1, 3 y 6 del suburbano, respectivamente. Este tramo no es el único que cuenta con su partida presupuestaria. Las cuentas del Ejecutivo regional para 2023 dedican fondos a la redacción de los proyectos del tramo sur (desde Cuatro Vientos al barrio de La Fortuna, en Leganés) y del tramo centro (de Conde de Casal a Mar de Cristal). Solo queda pendiente el tramo norte, que unirá Mar de Cristal y Valdebebas. Noticia Relacionada estandar No El Metro que viene: la ampliación de las líneas 3 y 11 arranca en 2022 Este transporte pasará de pagar 3,6 millones de euros en septiembre de 2020, a 8 este año por la subida de la luz, denuncia el consejero de Transportes El primer pedazo de esta expansión estará coronado por un intercambiador en Conde de Casal que comenzará a construirse en 2023, costará 29.146.664,59 euros y ocupará 7.547 metros cuadrados, de los que 3.500 metros cuadrados son edificables. El diseño afectará al entorno, el acceso a la capital por la A-3 a través de la avenida del Mediterráneo y al paseo de la Reina Cristina, y pretende «humanizar» el barrio. Un intercambiador «verde» El proyecto imagina un «edificio verde», con una altura máxima de 6 metros, elaborado con madera laminada y materiales sostenibles que disminuyen la proyección de CO2 al ambiente junto a generadores de energías renovables. La cubierta será ajardinada y protegida con paneles fonoabsorbentes para reducir la contaminación acústica. El estirón de la línea 11 responde a una demanda histórica de los vecinos del sur de Madrid. Los estudios de la Consejería de Transportes han extraído sus conclusiones: los mayores beneficiarios serán los usuarios de los distritos de Carabanchel, Usera, Arganzuela y Retiro. También los habitantes del barrio de La Fortuna, en el municipio de Leganés, que a diario deben parar en la estación de Plaza Elíptica para subir a la línea 6 y proseguir su viaje hacia cualquier punto de la red.

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