A la exigencia del certificado de vacunación en la hostelería gallega le quedan horas. En concreto, hasta que el próximo sábado decaiga la medida que el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia había autorizado hasta el día 26 de febrero, y para la que la Xunta no solicitará renovación. Los expertos del comité basan su decisión en la buena evolución de la pandemia en la Comunidad, que ya suma menos de 30 personas en las unidades de críticos, y que aguanta por debajo de los dos mil casos activos. Con la sexta ola ya en la cuneta, Galicia sigue su camino hacia una nueva normalidad en la que las limitaciones tienden a desaparecer. Esa fue la sensación que se les transmitió este miércoles a los hosteleros en la reunión a dos bandas que mantuvieron el departamento de Sanidade y los portavoces del sector, a los que se informó de las últimas novedades. Entre ellas, y más allá del destierro del certificado Covid, se modifican las restricciones de comensales por mesa, con una ampliación a diez personas en interior (actualmente son ocho) y de veinte en el exterior (cuando ahora son quince). Además, desde este fin de semana tampoco será necesario continuar con el registro de usuarios en los bares y se trabaja ya de forma conjunta con la administración en el protocolo de uso de baños y circuitos, entre otras cuestiones «a acomodar de la mano del sector», comentaron los presentes al término de la reunión. Con todo, las autoridades sanitarias barajan un horizonte de 15 días para revisar las restricciones vigentes en hostelería en la Comunidad gallega, por lo que el responsable de la cartera, Julio García Comesaña, avanzó que al cumplirse ese plazo se convocará otra reunión del comité clínico para abordar una «nueva relajación» de las medidas aún vigentes. Con la mirada puesta en la tercera Semana Santa bajo la amenaza Covid, el vicepresidente Alfonso Rueda aseguró ayer que «por fin se puede levantar» una de las dos medidas todavía vigentes en la hostelería (la relativa al certificado Covid). Este paso adelante sitúa a la Comunidad en una nueva fase, muy próxima atendiendo a las palabras del responsable gallego, a la ansiada salida del túnel. «Falta muy poco para volver a la normalidad», abundó Rueda después de agradecer la «paciencia» de uno de los sectores más tocados por las limitaciones. Sobre el parón que la explosión de la pandemia supuso para el gremio hostelero, Rueda recordó que de los 120 millones de euros dispuestos para ayudar a la reactivación del sector turístico, 90 se corresponden con los pagos realizados a la hostelería a través de los dos primeros planes de rescate y 35,7 millones de euros con distintas líneas de ayudas para apoyar al turismo, incluyendo los locales de hostelería y del ocio nocturno. Del otro lado de la mesa, y en representación de los hosteleros, Cheché Real agradeció «ir soltando lastre» y afirmó que «falta un poquito» para normalizar la situación. «Es un paso más, será el penúltimo», indicó en declaraciones a Ep para «abrir al cien por cien», en clara alusión a la restricción de comensales que, aunque relajada, seguirá vigente hasta nueva orden. Lo que sigue inamovible, pese a los altos porcentajes de vacunación y a la distensión de medidas en otros ámbitos, es la recomendación del uso de la mascarilla en los patios de los colegios. Galicia se queda sola en esta determinación después de la entrada en vigor del Real Decreto que el pasado día 10 eliminó la obligación de llevar mascarillas en el exterior «con carácter general, independientemente de la distancia interpersonal» y permitió que los niños volviesen a jugar en los patios sin esta protección facial. Frente a la decisión del Gobierno central -y a la recomendación de la Asociación Española de Pediatría- Comesaña se ratificó en la decisión adoptada en una reunión anterior en la que se consideran estos espacios, por los patios de las escuelas, lugares de aglomeraciones en los que interpretan necesario mantenerla puesta. Al respecto, insistió en que «la mascarilla siga siendo recomendada» en los recreos «y en el interior de las aulas». Sin fecha para un cambio de criterio sobre este polémico asunto, Galicia reportó ayer un total de 2.663 casos activos de Covid-19 en sus centros educativos, con seis aulas aisladas en la última semana a causa del virus. Así las cosas, lo único que plantean abordar en Sanidade de cara a los próximos días es un «nuevo cambio» en los aislamientos de los positivos y contactos estrechos, que Galicia defiende que pasen de siete a cinco días, acortando las cuarentenas a menos de una semana. Por ahora, la entrada en vigor de la nueva hoja de ruta implicará que el pasaporte Covid quede limitado, exclusivamente, a visitas a hospitalizados y residencias.De España https://ift.tt/OkTq5Ve
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