martes, 28 de enero de 2020

Junqueras se jacta de que el PSOE acepte el conflicto político

Durante doce horas, ayer, el Parlamento de Cataluña fue un gran escenario mediático para permitir seis mítines por parte de seis de los doce condenados por el referéndum ilegal del 1-O de 2017. La cámara autonómica se paralizó para que fueran pasando por la comisión del 155 (en la que no participan Cs, PSC y PP) Oriol Junqueras, Jordi Turull, Raül Romeva, Joaquim Forn, Josep Rull y Dolors Bassa, condenados por el Tribunal Supremo entre 10 y 13 años de cárcel por sedición, pena que cumplen en las cárceles de Lledoners (Barcelona) y Puig de les Basses (Gerona). A las 8.30 horas ya estaban los seis exmiembros del gobierno autonómico de Carles Puigdemont, eurodiputado y fugado de la Justicia, en el Palacio del Parlamento catalán, situado dentro del parque de la Ciudadela, que este martes estuvo totalmente tomado por los Mossos d'Esquadra, cuerpo policial encargado del traslado y la custodia de los presos hasta la comisión y su vuelta a la cárcel. En sus intervenciones, cada preso marcó perfil propio y según sus prioridades. Así, Junqueras, líder de ERC, reivindicó la negociación política abierta con el PSOE y el Gobierno de Pedro Sánchez, no se arrepintió de nada de lo que le ha llevado a la cárcel y reiteró que el independentismo volverá a convocar un referéndum de secesión. «La mesa de diálogo (con el Gobierno) es un paso adelante. Es la primera vez que se reconoce la existencia de un conflicto político (por parte del Gobierno). La primera vez que se reconoce el hecho de que los interlocutores han de hablar de igual a igual respecto a este conflicto político. Esto es lo que hemos pedido durante años. Ahora que lo tenemos, hemos de aprovecharlo. La bandera del diálogo es la mejor de las banderas para hacer realidad aquella república que tanto deseamos», señaló el exvicepresidente de la Generalitat. Tras defender el procés, incluida la convocatoria de un referéndum ilegal, Junqueras reiteró, una vez más, que el independentismo volverá a hacerlo: «Un referéndum de autodeterminación es una cosa normal. Y nosotros queremos volverlo a ejercer. Y lo volveremos a ejercer». Además, Junqueras se comparó con Lluís Companys, Séneca y H. D. Thoreau y acusó a las instituciones democráticas de utilizar «las cloacas del Estado» para crear un deep state. El Gobierno respondió ayer a las palabras de Junqueras en boca de su portavoz, María Jesús Montero, que advirtió de que «ya sabemos cómo acaba la DUI o un referéndum». Se afanó en defender que el Gobierno busca «otro escenario» y reclamó abrir otra etapa porque «ese camino conduce a un sitio que a ninguno nos interesa seguir profundidad». Insistiendo en que la apuesta del Gobierno es explorar la «amplia gama que ofrece el autogobierno».

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