Ayudas al alquiler en Madrid para rentas medias: hasta 900 euros al mes y el pago de la fianza a plazos sin interés

Aumentar la oferta de vivienda para satisfacer la demanda y que los precios sean más accesibles para todos los madrileños. Ese es el objetivo del Ayuntamiento de Madrid para los próximos años, una meta que se aborda desde todos los flancos posibles. La Empresa Municipal de la Vivienda y Suelo (EMVS) entregará 3.000 pisos destinados a personas con vulnerabilidad entre este año y el final del mandato. A ellas se sumarán parte de los 10.000 inmuebles vacíos que el Consistorio pretende recuperar en los próximos años para que sean alquilados por jóvenes menores de 35 años y familias con rentas medias. El Ayuntamiento de Madrid ha lanzado el «Plan Reviva» para, como se recoge en los Acuerdos de la Villa, impulsar el mercado con la EMVS como intermediario para ofrecer garantías a arrendatario y arrendador. En total se invertirán 30 millones de euros durante los próximos tres años y se espera que este 2020 se adhieran al plan un centenar de propietarios y que alcancen el millar a mitad del próximo mandato. Los dueños de los inmuebles que se acojan cederán su piso vacío a la EMVS durante un periodo mínimo de cuatro años, sin perder la titularidad. A cambio tendrá la garantía de recibir una renta mensual tanto si la casa tiene o no inquilino durante ese plazo. Cada propietario podrá ceder un máximo de cinco viviendas a la EMVS y éstas deberán llevar vacías un mínimo de nueve meses, excepto si se trata de viviendas turísticas o si los inmuebles se han quedado vacíos porque los titulares han tenido que ingresar en una residencia de mayores. Además, si la vivienda necesita reformas, la EMVS adelantará su coste hasta un máximo de 45.000 euros a un 0% de interés. El propietario podrá devolver este anticipo descontándolo de la renta que percibe cada mes. Hasta el 30% de sus ingresos En cuanto al inquilino, nunca pagará más del 30 por ciento de sus ingresos por el alquiler y podrán recibir una ayuda directa, el «Bono Vivienda», en función del número de miembros de su unidad familiar o sus ingresos totales, entre otras variables. Los requisitos básicos para poder acceder al programa son llevar un mínimo de cinco años empadronado en Madrid y tener unos ingresos brutos, en función del número de miembros de la unidad familiar, de entre 3 y 7,5 veces el IPREM, es decir, entre 32.200 y 88.200 euros. También se valorará ser menor de 35 o mayor de 65 años, tener una discapacidad igual o superior a un 33 por ciento, una dependencia de grado II o III, padres o madres separadas o divorciadas con menores o hijos de menos de 25 años dependientes económicamente o con discapacidad. El bono también se podría incrementar si el solicitante cumple unos requisitos específicos, como ser familia numerosa o monoparental, tener una discapacidad igual o superior a un 65 por ciento, tener una dependencia de grado III, ser víctima del terrorismo o de violencia de género. En todo caso, el «bono vivienda» nunca podrá superar los 900 euros mensuales y se establece un alquiler mínimo de 450 euros. Para los menores de 35, la EMVS ofrece también el plan «conFIANZA Joven», a través del que la EMVS anticipa a los inquilinos que lo soliciten la fianza (un mes) que les exige el arrendador y tendrán 24 meses para devolver el importe sin abonar intereses. En este caso, los solicitantes deben llevar empadronados en Madrid al menos cinco años, tener unos ingresos brutos anuales inferiores a 4 veces el IPREM (37.300 euros brutos anuales) y que el contrato de alquiler entre propietario e inquilino esté gestionado a través de la EMVS. La vicealcaldesa de Madrid, Begoña Villacís, quiso subrayar que ese umbral mínimo de 32.000 euros implica un sueldo neto de 24.550 euros, lo que, a su juicio, «no se puede calificar de rico». «Se pactó que para pagar el precio del alquiler no se destinara más de un tercio de ingresos», insistió. En cuanto a la posibilidad de que se sumen a esta iniciativa los propietarios de pisos turísticos, el alcalde, José Luis Martínez-Almeida, considera que «es prudente en este momento en el que apenas tienen actividad» y, al mismo tiempo, permitiría solucionar parte del «problema de residentes» que más lo padecen, los del distrito de Centro.

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