Pensando en la Eurocopa, una de las certezas más claras que se le intuyen a Luis Enrique es su pareja de centrales favorita. Dos años le ha costado a la selección encontrar al sustituto ideal de Gerard Piqué hasta que se ha dado con Pau Torres. Con él se ha terminado el trajín de zagueros que se produjo en Las Rozas intentando llenar el hueco dejado por el azulgrana tras el Mundial de Rusia. Desde entonces, Sergio Ramos sumó hasta cinco compañeros en el eje de la defensa hasta que Pau Torres se hizo fuerte en la primera convocatoria de la segunda etapa de Luis Enrique. A partir de ahí ha sido titular junto al capitán en todos los encuentros oficiales. Normal que el seleccionador alabe hasta su belleza: «De Pau me gusta todo, su salida de balón, su sentido táctico, es alto, guapo... Todo me gusta». Torres es uno de esos rostros aún semidesconocidos para el aficionado medio que tanto han proliferado en la selección de los últimos tiempos. No juega en uno de los grandes y es joven, hasta enero no cumplirá los 24 años. Aún no ha alcanzado los 50 partidos en Primera, pero su progresión es asombrosa. «Yo soy poco objetivo porque le quiero como si fuera un hijo», relata a ABC Javi Calleja, su entrenador en el Villarreal la temporada pasada. «Es un chico íntegro y responsable. Y un apasionado del fútbol. Lo vive y lo siente de forma especial». Calleja fue quien dio sus primeros minutos en Primera a Pau Torres en la temporada 2017-18. Al año siguiente, el central se marchaba cedido al Málaga para jugar en Segunda. «Caminero, nuestro director deportivo, apostó fuerte por traerlo», explica Juan Ramón López Muñiz, que entrenó al central en el conjunto andaluz. «Venía haciendo muy buenas campañas y respondió a todas nuestras expectativas. Es un gran profesional, buen chico y muy centrado». Gracias a su buena campaña en el club blanquiazul recibió su primera y única llamada para la sub 21, ya en marzo de 2019. «Creo que su paso por el Málaga le dio agresividad e intensidad. Le convirtió en un defensa mucho más completo», dice Calleja. Debió ser así porque al curso siguiente solo necesitó siete partidos para recibir la llamada de la absoluta, dirigida entonces por Robert Moreno. Debutó en una goleada ante Malta (7-0) en la que sustituyó a Ramos. No llevaba ni un minuto en el campo cuando anotó su primer gol como internacional, al rematar con el pecho una asistencia de Alcácer tras un saque de esquina. Orgullo de su ciudad Pau es también el orgullo de Villarreal. Es el primer internacional de esa localidad y en el mejor ejemplo del buen trabajo que se hace allí con la cantera. Ahora pocos se atreven a pronosticar cuánto tiempo le queda a Pau Torres en el conjunto amarillo porque muchos de los grandes equipos de Europa andan ya haciendo números con él. «A la hora de sacar el balón es el futbolista que más claridad tiene», insiste Calleja. «Para cualquier equipo que quiera jugar en combinativo la visión de juego es fundamental, y en eso él es buenísimo». «Tácticamente es espectacular», corrobora López Muñiz. «Ve el juego como nadie, siempre se posiciona bien». A ambos técnicos les cuesta encontrar algún defecto en él. Tienen claro que su combinación con Ramos en la selección será magnífica. «Los dos tienen mucha personalidad y son centrales maravillosos. Pau seguro que va a ganar en experiencia al lado de Ramos y aprenderá a gestionar los grandes partidos».De Deportes https://ift.tt/3nm8kcl
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