El Marcelo, el flanco débil del Real Madrid

Marcelo ha sido un mago del balón durante doce temporadas en el Real Madrid. Su creatividad ofensiva superaba su debilidad a la hora de defender. No era un lateral, era un centrocampista de arte que llegaba desde atrás. Ramos y Xabi Alonso le cubrieron las espaldas durante años para que atacara con tranquilidad y rompiera defensas cuando no había manera de romperlas. Se marchó Xabi y llegó Casemiro para realizar la misma labor de protector del lado izquierdo. Pero actualmente, hay que decirlo con crudeza, Marcelo no marca aquella diferencia. El físico ya no acompaña a su calidad. La llegada a la titularidad de Mendy, ganada la temporada pasada, confirmó esa verdad. Zidane le ha dado oportunidades constantemente para intentar recuperar la esencia del brasileño y no le ha respondido. La realidad es que Marcelo define el flanco débil de la defensa del Real Madrid. Marcelo se lamentaba en la grada, al borde de las lágrimas, cuando Zidane le sustituyó por Mendy el sábado en busca de una remontada que no llegó. Su semblante revelaba su impotencia, la de todo su equipo, para remontar la ventaja del cuadro blanquiazul. Fue criticado por regalar el saque de esquina que fue preludio del penalti de Nacho. Se le puede acusar de desconcentración, un problema general del Real Madrid, o de un simple fallo, pero no era el partido para cebarse precisamente con el futbolista suramericano, pues Nacho cometió un error al tener separado el brazo en la jugada castigada como pena máxima y Courtois, después, entregó gratuitamente el segundo tanto visitante. Lo que sí es verdad es que los rivales aprovechan la presencia de Marcelo para atacar por su lado izquierdo, el derecho del atacante. Lo hicieron el Shakhtar y el Cádiz. Lo hizo el Alavés. Una ruleta rusa Hay un dato sintomático del talón de Aquiles defensivo del Real Madrid. Zidane ha dirigido 59 partidos de Liga desde que regresó al cargo el 11 de marzo del año pasado y las diez derrotas acumuladas las sufrió con Marcelo en el once. El balance con el brasileño es de 16 victorias, tres empates y esa decena de derrotas. Sin el suramericano el Real Madrid consiguió mantenerse invicto, veinte triunfos y diez empates. Los números desvelan que con Marcelo se asumen riesgos tácticos, como una ruleta rusa, y el conjunto blanco puede ganar o perder, pero no posee equilibrio. Dos derrotas pueden deberse a muchos factores, pero cuando un defensa se encuentra en todas ellas es que algo sucede, especialmente cuando no hay fracasos si ese futbolista no juega. Los números con Mendy son más regulares. El francés ha sido titular en las situaciones importantes, ante el Barcelona y el Inter. Marcelo, al igual que Isco, no puede ser ya un jugador importante en el Real Madrid. Hay que asumirlo.

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