
El ataque a dos mujeres en un supermercado el lunes a mediodía en El Molar a manos de Noelia de Mingo no ocurrió porque hubiese dejado la medicación. Los dos últimos informes de los psiquiatras que llevaban su control, tanto el del hospital Infanta Sofía como de los forenses, señalan que cumplía a rajatabla con su tratamiento y que no presentaba «descompensación psicótica». Por eso, los especialistas analizan ahora qué pudo pasar para que, 18 años después de matar a tres personas y dejar heridas graves a otras cinco en la Fundación Jiménez Díaz, donde era residente en Reumatología, De Mingo volviera a atacar. Lo hizo aprovechando que su madre y tutora había ido al médico a curarse las heridas...
Ver Más
De España https://ift.tt/39nRO6Q
0 comentarios:
Publicar un comentario