Marco Antonio de la Ossa: «El Estival forma ya parte de la tradición cultural de Cuenca»

A pesar de su juventud, Marco Antonio de la Ossa (Cuenca, 1978) es una de las personas que más ha trabajado por la cultura en su ciudad natal. Es el organizador del consolidado Estival Cuenca -que este año llega a su XII edición-, una propuesta con la que se da la bienvenida al verano y que combina conciertos de destacados artistas del panorama nacional e internacional, jazz session, jornadas didácticas y talleres de musicoterapia. Por su trabajo acaba de ser reconocido con el Premio 'Tierra de Maestros 2023' a la gestión educativa y pedagógica, un galardón que le consolida como un referente para Castilla-La Mancha. Maestro de educación musical, licenciado en Historia y Ciencias de la Música, máster en gestión cultural y Doctor en Bellas Artes. Marco Antonio es funcionario del cuerpo de maestros, en educación musical, desde 2001, y profesor asociado en el departamento de Expresión Musical, Plástica y Corporal de la UCLM. Es el autor del libro «La Banda Municipal de Música de Cuenca en la Guerra Civil Española». Noticia Relacionada estandar No Premios y homenajes en Cuenca centrarán la actividad del Instituto de Cultura Gastronómica ABC En una iniciativa de anticipo de la capitalidad gastronómica, rendirá homenaje al chef José Ignacio Herráiz, mientras que Xandra Falcó recogerá el premio a Carlos Falcó a título póstumo El director del festival de música hace un repaso a los doce años de la cita , luciendo con orgullo una trayectoria ascendente donde la calidad, la belleza de los escenarios y la variedad de estilos han sumado fuerzas para consolidar este evento en la agenda cultural. —¿Qué representa haber sido reconocido con el premio 'Tierra de Maestros'? —Sorpresa, felicidad y agradecimiento, por muy diferentes motivos. —¿Cree que es un respaldo al trabajo que ha realizado al frente del Estival Cuenca? —Es lo que ha considerado el jurado, que ha valorado las propuestas pedagógicas del Estival, y que para nosotros son muy importantes. En primer lugar, el Encuentro Internacional de Docentes de Música de Cuenca y las jornadas de Didáctica de la Música, en la sección Estival Científico, algo fundamental para este certamen. También lo son los talleres de musicoterapia para personas con diversidad funcional, los conciertos didácticos o las clases magistrales, entre otros. —¿Qué programas didácticos y de música quiere promover este año en el marco del Estival? —Queremos continuar con las propuestas de años anteriores. Por ejemplo, el concierto didáctico para los más pequeños será protagonizado por el 'Ensemble de Saxofones' de la Escuela Municipal de Música de Cuenca, que dirige Miriam Castellanos y que está integrado por estudiantes. También se han organizado dos talleres de música para los niños, que serán impartidos por Blanca Pinedo, así como los ocho talleres de musicoterapia para personas con discapacidad y cáncer. Otra propuesta va a ser el IV Encuentro Internacional de Docentes de Música, entre otros. —Entonces, ¿el festival sigue apostando por propuestas atractivas y diferentes para atraer más público? —Es nuestra intención. Nunca hemos querido centrarnos en un solo estilo o en una escena. Queremos abrir escenarios dentro de una línea artística propia. No nos cerramos a nada y tengo que destacar la presencia de 'Miss Caffeina' y los conquenses 'Panic Relief', en el escenario Solán de Cabras del Parador. —¿También van a haber nuevos escenarios en esta edición? —Así es. La Catedral de Cuenca abrirá sus puertas y el Patio de la Limosna -o el claustro- para un concierto que ofrecerán el armonicista Antonio Serrano y la pianista Constanza Lechner, quienes harán un recorrido clásico por las músicas españolas y argentinas del siglo XX. Desde Piazzola a Granados. Además, no descarto que haya alguna sorpresa durante este recital. —¿Percibe que el público apoya y respalda esta cita cultural? —Así es. El público está cada vez más cerca del Estival y nos vamos haciendo hueco en la tradición cultual de la ciudad. El objetivo es seguir programando año tras año, respetando la calidad de los conciertos y sus emplazamientos. Nos hemos ido adaptando a todo en estos últimos años. —Finalmente, como investigador musical, ¿cree que la música es un buen estímulo para que los jóvenes puedan desarrollar su creatividad? —Por supuesto. Es fundamental y básica la formación, tanto en el desarrollo personal de los niños y jóvenes.

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