El fútbol mundial está de tal manera que uno del Barça como yo tiene que pedirle unas entradas al presidente del Madrid para recordar cómo es ganar una Champions y sentir que estás haciendo historia en lugar del ridículo. La sede de París parecía un buen presagio. Las finales hay que jugarlas en capitales importantes, con restaurantes seguros y bares que sepan a qué vinimos. París estuvo merengona desde bien pronto por la mañana. De un merengón -sobre todo en Le Marais- sudamericano. Principalmente mexicano pero también colombiano y venezolano. La misma mezcla que la del chorro de dinero que está detrás del boom de Madrid ciudad y comunidad. En L'Ami Louis -con su foie eterno como el Madrid en... Ver Más
De Deportes https://ift.tt/eswC6bo
0 comentarios:
Publicar un comentario