El lunes, pasadas las ocho de la tarde, se producen dos llamadas de teléfono que desencadenan nuevos movimientos que cambian todo el tablero del juego político en la capital. Dos concejales de PP y Ciudadanos, respectivamente, descuelgan el teléfono para llamar a los ediles de Recupera Madrid, el grupo mixto formado por los cuatro concejales escindidos de Más Madrid . La relación con Vox está en punto muerto. Rechazan siquiera negociar. Por eso, la única salida parece un nuevo pacto con los carmenistas –gracias a ellos salvaron la ordenanza de Movilidad–, que sí se han mostrado abiertos a llegar a acuerdos. Javier Ortega Smith lleva semanas sin querer sentarse a hablar de las cuentas municipales con PP y Cs. Los de Santiago Abascal castigan a José Luis Martínez-Almeida al tiempo que han dado la llave a Isabel Díaz Ayuso para sacar adelante sus primeros presupuestos de la legislatura en un intento por aprovechar electoralmente el punto débil de la batalla interna en Génova. Ante esta negativa constante, resulta crucial el apoyo de los ediles carmenistas para evitar la prórroga de los presupuestos, con lo que eso conlleva (cerca de 200 millones de euros de la Unión Europea quedarían comprometidos en este escenario de incertidumbre). En esa conversación telefónica, según apuntan a ABC fuentes conocedoras de la negociación, los carmenistas quedan en enviar un documento marco con las propuestas al gobierno de PP-Cs. Es por eso que la delegada de Hacienda y Personal, Engracia Hidalgo, amplía el plazo de presentación de enmiendas 48 horas. Esta noticia se la hace saber al resto de portavoces de los grupos municipales del Área de Hacienda a la mañana siguiente, ayer. El periodo finalizaba a las 14 horas, pero con esta prórroga se amplía hasta mañana a las dos de la tarde. A priori, este balón de oxígeno estaba planteado para acercar posturas con Recupera Madrid, pero un nuevo giro de guion volvió a cambiar el escenario en cuestión de horas. Tras conocer este posible acercamiento de Almeida a los carmenistas, Ortega Smith reacciona: responde a un correo electrónico enviado por el regidor en el que le invitaba a reunirse ayer a las 9 horas «para ver los presupuestos de este año», según consta en el e-mail, y le propone aplazar la cita a mañana. «Por agenda del portavoz, ésta solo puede tenerse el jueves», explican desde Vox. Este sorpresivo golpe de timón desactiva de inmediato el argumento de Almeida de que por la cerrazón de Vox y para evitar que la capital se quede sin presupuestos nuevos tienen que pactar con Recupera Madrid, con la izquierda. De ahí la respuesta del regidor ante los medios de comunicación pasadas las 13 horas de ayer, cuando ya estaba en su bandeja de entrada la mano tendida de Ortega Smith: «Esta llamada no ha sido solo al grupo mixto. Ha sido a todos los grupos municipales. Vox tiene 48 horas para rectificar su posición de ni siquiera querer hablar con el equipo de Gobierno». Incluso fuentes de Alcaldía llegaban a asegurar que en este plazo de 48 horas –la cita con Vox se produciría ya al término del tiempo de descuento– «no se van a sentar a negociar con ningún grupo». «Ayer parecía que sí que tenía mucho interés en negociar con nosotros», apunta a ABC uno de los ediles díscolos, que califica de «sorpresa» que desde el entorno de Almeida se transmita que no se va a sentar a hablar en estas 48 horas. «Nosotros ya hemos presentado el documento marco que nos pidieron, si no obtenemos respuesta, ya saben lo que hay: volveremos al escenario anterior, si no quieren negociar, presentaremos una enmienda a la totalidad», inciden. Tiempo de descuento Quien sí se mostró muy crítica con el partido de Ortega Smith fue la vicealcaldesa, Begoña Villacís, porque, dijo, cuando se gobierna «uno necesita una cierta lealtad, certidumbre y seguridad»: «La que daba Juan Marín cuando aprobaba los presupuestos en Andalucía o Ignacio Aguado en la Comunidad de Madrid, aprobándolos siempre». «Vamos a entablar ya las conversaciones con todos quienes quieran que Madrid tenga unos presupuestos», reconoció. En lo que sí coincidieron el alcalde y la vicealcaldesa es en señalar las líneas rojas: «Bajar los impuestos». Precisamente, sobre este aspecto, los concejales de Recupera Madrid señalaron como uno de los requisitos más importantes que se apruebe una bajada impositiva para compensar «a quienes han sufrido durante muchos años la subida del ‘catastrazo’ de Alberto Ruiz-Gallardón durante diez años y que tienen inmuebles por debajo de los 300.000 euros». Esta rebaja impositiva que plantean podría beneficiar a dos millones de recibos. Otra de las líneas del grupo mixto iría a reducir el endeudamiento de la ciudad, que supondría reclamar a la Comunidad la financiación de competencias impropias. En esta negociación a dos bandas, no obstante, solo caben tres. Los carmenistas piden aislar a Vox para apoyar el borrador de las cuentas, mientras que Vox ve inviable pactar con la izquierda.La cita de mañana, no obstante, puede salir cara a Almeida si no logra el apoyo de Vox y por el camino agota la paciencia de los carmenistas. Cada gesto será decisivo hasta el último minuto.De España https://ift.tt/3EWf0XT
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