La política del Real Madrid de fichar futbolistas libres para destrozar el monopolio del dinero impuesto por los clubes estado gusta a muchos jugadores. Los profesionales cotizados valoran que marcharse con la carta de libertad a otro club les permite firmar por un grande sin el problema del traspaso y les genera personalmente una suculenta prima de fichaje que llena sus arcas como premio a su carrera. El caso de David Alaba ha sido tomado como ejemplo por bastantes compañeros de profesión. El austríaco dejó el Bayern para fichar por el Real Madrid con un premio de 20 millones extras. El alemán Antonio Rudiger quiere «hacerse un Alaba». El central del Chelsea tiene 28 años y considera que es el momento de dejar la Premier y firmar por el Real Madrid. Su contrato con el conjunto londinense finaliza en julio del próximo año y no desea renovar tras un lustro vistiendo de azul. Su anhelo es militar en el club español y hacer historia en la casa más laureada de Europa. Rudiger quiere acogerse a la política del Real Madrid de fichar jugadores libres, una filosofía que busca luchar contra los precios imposibles de los clubes estado, que son sujetados económicamente por países como Qatar (PSG) y Kuwait (City) El padre de Rüdiger, Matthias Rüdiger es alemán, mientras que su madre Lily es originaria de Sierra Leona. El exfutbolista Sahr Senesie, su hermanastro, es su agente y manifiesta que el Real Madrid está interesado en su contratación con la carta de libertad en la mano y una prima de fichaje a su vera. El Bayern y el PSG también pretenden su adquisición. El club parisino ha puesto mucho empeño en ello con tal de ganarle una batalla al Real Madrid tras la guerra eterna por Mbappé, y se ha reunido con Senesie para llegar a un acuerdo que no consiguió. Pero Rudiger expresa que su anhelo es pertenecer al equipo español. La casa blanca señala que no ha negociado esta operación. Hay tiempo, seis meses, para ello. La diatriba será su ficha. La entidad española piensa renovar el contrato de Militao por cinco temporadas con unos emolumentos de 8,5 millones anuales y ese mismo salario es el que tendría el defensa germano, que hoy percibe seis millones en el Chelsea. Rudiger es un jugador que se manifiesta habitualmente contra el racismo. Él mismo relata que de pequeño sufrió ese golpe en Alemania cuando vio que una persona mayor perdía varios paquetes, que cayeron al suelo, y cuando fue a ayudar lo que sintió fue el rechazo y el miedo de esa persona, que pensaba que le iba a robar por el mero hecho de ser de raza negra. Ha soportado también el racismo en la Premier. Hace justamente dos años, el 19 de diciembre de 2019 lo vivió en sus carnes en el triunfo del Chelsea, 0-2, en cancha del Tottenham. Los seguidores locales le cantaron que era un «mono» cuando Son Heung-min le hizo una entrada que le costó la expulsión. Rudiger escribió posteriormente un alegato en la prensa titulado: «Este artículo no acabará con el racismo».De Deportes https://ift.tt/3qFb8oe
0 comentarios:
Publicar un comentario