El clásico del Camp Nou dejó un poso dulce tras una semana complicada en la que Cádiz y Shakhtar provocaron la primera minicrisis de la temporada, pero, sin tiempo para seguir saboreando el brillante triunfo en el clásico, el Madrid se juega su primera final de Champions un 27 de octubre. La derrota frente a los ucranianos obliga a los de Zidane a ganar hoy en Monchengladbach si no quiere ver como pone en serio peligro su clasificación para los octavos de final. No hay mucho más margen de error en un grupo donde todos los equipos tiene armas suficientes para poner en apuros a los blancos. «Ya sabemos la importancia que tiene este partido después de la derrota en la primera jornada. Ya tenemos la presión encima. Es una final para nosotros y tendremos que hacer un partido tan bueno como ante el Barcelona», explica Kroos, consciente que ante el Borussia un resultado que no sea la victoria complicará enormemente el pase a octavos. La gran novedad en los blancos es el regreso de Hazard a la convocatoria, tras dos meses lesionado. El belgatrabajó por segundo día junto al resto de sus compañeros y se ejercitó ante la atenta mirada de Zinedine Zidane en el Borussia Park, en vísperas del que puede ser su regreso y los primeros minutos de su temporada en la segunda jornada de la Liga de Campeones. Un solo partido ha jugado Hazard en los tres últimos meses. Precisamente en la Liga de Campeones cuando forzó para intentar ayudar al Real Madrid en la búsqueda de la remontada ante el Manchester City, en la vuelta de los octavos de final en el Etihad, y acabó más dolorido aún de su tobillo operado. El Borussia Moenchengladbach es un equipo a tener en cuenta y que ya en la Bundesliga ha sido capaz de crear problemas al ahora todopoderoso Bayern. El conjunto de Marco Rose es atrevido y seguramente saldrá a presionar a los de Zidane para incomodarles y luego sorprenderles con su velocidad. Los germanos marchan quintos en la Bundesliga, donde empezó perdiendo por goleada ante el Borussia Dortmund (3-0), en lo que es su única derrota hasta ahora. La pasada jornada, con rotaciones, se impuso 2-3 a domicilio al Mainz en un partido en el que destacaron Hofmann y el veterano Stindl, dos de sus piezas claves de un Borussia con calidad en el medio (Neuhaus y Kramer).
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