Los desplantes de Pedro Sánchez al Parlamento se cronifican y se convierten en costumbre. El presidente del Gobierno, con su actitud huidiza, logró el jueves aunar a la oposición en un insólito frente de críticas: desde Vox hasta los independentistas, prácticamente todos los grupos del Congreso recriminaron al jefe del Ejecutivo su ausencia de un debate primordial. Ya en marzo se zafó del control parlamentario con la excusa de la pandemia y son también reiteradas sus evasivas al Senado. Esta vez, la Cámara Baja debatía nada menos que si daba luz verde a un estado de alarma de medio año sin más votaciones. En la oposición, se percibió la jugada de Moncloa como un chantaje; una disyuntiva entre regalar a... Ver MásDe España https://ift.tt/3jIBjoB
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