
El Gobierno que preside el socialista Pedro Sánchez instó este martes al presidente de la Generalitat de Cataluña, Quim Torra, a «no poner en riesgo el camino de normalización emprendido». Esta es la reacción oficial que se trasladó a primera hora de este martes desde el Ejecutivo de Sánchez después de los incidentes ocurridos ayer en las calles e instituciones catalanas con motivo de la conmemoración del referéndum ilegal del 1 de octubre de 2017. «Lo ocurrido ayer en Cataluña demuestra que la política catalana tiene que volver a las instituciones, tiene que volver al Parlament», sostienen desde Moncloa. El Ejecutivo central considera que «el president Torra debería cumplir con sus responsabilidades institucionales y no poner en riesgo el camino de normalización política emprendido por el Gobierno de Sánchez, alentando a los radicales que creen que las calles son solo suyas y asedian las instituciones que representan a todos los catalanes». Fuentes gubernamentales consultadas por Servimedia se muestran convencidas de que la celebración del 1-O se les ha vuelto «en contra» a los independentistas. En la misma línea se sitúa el PSC, que considera que los independentistas han vivido este año un 1-O en cierto modo «al revés» del que vivieron el año pasado, porque han visto como la Policía autonómica, los Mossos ha tenido que intervenir como fuerza antidisturbios y cargar contra los manifestantes.
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