La economía del País Vasco creció a un ritmo del 2,6% interanual en el tercer trimestre del año, lo que implica un descenso de tres décimas respecto al período abril-junio. Los datos que publicó ayer el Eustat confirmaron la desaceleración que venía anunciando en las últimas fechas el Gobierno autonómico, que reconoció que el avance del Producto Interior Bruto (PIB) es incluso «ligeramente inferior» al previsto. Concretamente, el avance de las Cuentas Trimestrales reveló que el PIB vasco aumentó un 0,5% intertrimestral. Si se comparan los datos con los del período julio-septiembre de 2017, la economía del territorio experimentó un incremento del 2,6%, tres décimas menos que en el segundo trimestre. El Eustat informó de que, desde el lado de la oferta, el crecimiento se debe principalmente al buen comportamiento agregado del sector servicios y de la construcción, que compensaron en gran medida la debilidad del sector primario y la desaceleración de la Industria. De esta forma, el territorio acumula ya dos trimestres consecutivos de menor crecimiento, al tiempo que pierde medio punto de intensidad respecto al máximo alcanzado en el primer trimestre (3,1%). En lo que respecta al empleo, el Instituto vasco de Estadística informó del aumento del 2% en relación al tercer trimestre del pasado año, lo que supone una décima por debajo del crecimiento experimentado en el segundo trimestre. El incremento intertrimestral en la ocupación fue del 0,4%, dos décimas por debajo del estimado entre abril y junio. Llamada a la calma Los datos ponen de manifiesto la desaceleración de la economía vasca, que se produce sin embargo «dentro del escenario macroeconómico previsto». El departamento de Hacienda y Economía aseveró ayer que no hay que caer en el alarmismo: «Es importante aclarar que no nos encontramos ante una recesión -explicó en un comunicado el área del consejero Pedro Azpiazu-. La economía crece, pero de forma más moderada». En este sentido, destacó que la cifra publicada «es tan solo ligeramente inferior a la tasa que se preveía» para este período tanto en términos interanuales (se esperaba un 2,7%) como en intertrimestrales (0,6%). «Lo importante es la tendencia, y en eso se sigue cumpliendo el guión que se anticipaba: una suave pérdida de tono hasta aproximarse a valores algo superiores al 2% durante los siguientes trimestres», añadió Hacienda, que destacó que la información coyuntural disponible hace pensar que en un entorno económico más inestable podría estar afectando al clima industrial «el sector más expuesto a la competencia exterior». En este punto hizo alusión a factores como la «guerra comercial, el desafío italiano y el aumento del populismo». «Todavía hay fuelle» Por el contrario, el Ejecutivo celebró la evolución «muy favorable» de los servicios, que generan más de dos tercios del PIB; así como el «notable incremento» del empleo, que «hace pensar que la economía vasca todavía tiene fuelle para anotar variaciones interanuales significativas en el tramo final de este año y en todo el próximo». En definitiva, sentenció Hacienda, se ha producido una desaceleración de la economía «pero sin alarmismo», pues el fenómeno se encuentra «dentro del escenario macroeconómico previsto».De España https://ift.tt/2RouPgK
0 comentarios:
Publicar un comentario