sábado, 29 de mayo de 2021

El 99% por ciento de los fallecidos por Covid en Galicia tenían más de 50 años

Que el Covid-19 se ceba con las personas de más edad es una evidencia que quedó clara en los primeros compases de esta pandemia mundial. Lo que se desconocía hasta el momento era la dimensión en la que la enfermedad atacó a los grupos de más años, en comparación con la población más joven. Y en el caso de la Comunidad gallega, la comparación es abrumadora. Según un estudio elaborado por la Universidad de Santiago (USC), el 99 por ciento de los fallecidos a causa del coronavirus durante el primer año de la epidemia habían cumplido los 50 años. Además, más del 70 por ciento de esas pérdidas humanas se corresponden con mayores de 80 años, pese a que éstos solo representan un 9 por ciento de la población total. El estudio fue publicado recientemente en un medio internacional (la revista ‘International Journal of Environmental Research and Public Health’) y está realizado por el profesor de Análisis Matemático de la USC, Juan José Nieto, junto con los profesores de la UVigo Iván Area y Henrique Lorenzo, y el experto del Sergas Pedro J. Marcos. En el documento se radiografían los distintos momentos de la pandemia en los hospitales gallegos a través de las personas fallecidas en ellos, pero también a través de los ingresos tanto en planta como en las unidades de críticos. La idea era comprobar la evolución del virus a lo largo de tres escenarios clave: durante la primera ola; en el primer año completo y en el período comprendido entre el 1 de enero de 2021 y los primeros días de abril de 2021, coincidiendo con las primeras vacunaciones y con la propagación de la variante inglesa, ahora mayoritaria en la Comunidad en un 90 por ciento de los casos detectados. De este análisis cronológico se desprenden dos conclusiones cruciales para entender el efecto del virus entre la población gallega. Por una parte, que el máximo diario de personas fallecidas en la primera y la tercera ola tienen valores muy semejantes, lo que confirma que se trató de los dos momentos más críticos en lo que a contagios y presión asistencial se refiere, aunque con diferencias sustanciales. Otra de las evidencias de este trabajo, basado en los modelos matemáticos, radica en que el porcentaje de personas fallecidas decrece de forma llamativa a medida que va avanzando la campaña de vacunación, sobre todo en lo que concierne a los mayores de 80 años, que empezaron a inmunizarse a finales de 2020. Echando mano de los datos sobre esta horquilla de edad, la más golpeada por la enfermedad, los autores manifiestan que de los 10.836 octogenarios que resultaron infectados, 1.643 murieron. «Es decir, fallecieron más de un 15 por ciento de las personas mayores de 80 años que enfermaron», suscriben. El estudio también desmonta una de las creencias más extendidas durante el último año, la de que el Covid no afectaba a los menores. Algo que las cifras, aseguran los firmantes del estudio, rebaten. Durante la primera ola, los datos oficiales sobre la afectación en los grupos de edad de 0-9 años y de 10-19 arrojaban porcentajes ínfimos de la infección, del 0,84 por ciento y del 1,61 por ciento de los casos, respectivamente, es decir, algo más del 2 por ciento de los casos, cuando estos grupos representan casi el 16 por ciento de la población. Sin embargo, si esto se compara con lo sucedido a partir del 1 de enero de 2021 (transcurrido el primer trimestre del curso escolar) se observa que en el grupo de 0-9 se detectaron el 7,93 por ciento dos casos y en el grupo de 10-19 el 9,99 por ciento. Con la vuelta a las aulas y la extensión tanto de las pruebas PCR como de los antígenos, «entre la población se observó que el porcentaje de casos detectados por grupo de edad es muy similar», asumen los redactores del informe. «El mito de que el Covid no afecta a las personas de menos edad es falso», recalcan ante una estadística objetiva y real, que también les permite afirmar que «una población de unos 3.000 contagiados asintomáticos menores de 20 años no detectados actuó como vector de transmisión de la enfermedad durante la primera ola». Y otra falsa creencia que se desmorona: los datos confirman que el peligro al que la ciudadanía se enfrentó durante la tercera ola no es comparable a nada, porque durante este tiempo —de mediados de enero de 2021 a mediados de febrero, por efecto de las Navidades— se produjeron cuatro veces más contagios que en la explosión de la pandemia, cuando ni siquiera la mascarilla era obligatoria.

De España https://ift.tt/3fwjk5Q

0 comentarios:

Publicar un comentario