Stefanos Tsitsitas es una realidad. Todavía le queda mucho por crecer, por evolucionar, por aprender, pero ya da pasos de gigante hacia la élite. Al Mutua Madrid Open, donde el año pasado jugó con una invitación, acude después de dar un salto de calidad tras alcanzar las semidfinales del Abierto de Australia, ganar en l Provenza y en Estoril hace unos días. Es un tenista diferente, que quiere ser diferente tanto dentro como fuera de la pista. Tiene 20 años y no le asustan las alturas. Tmpoco enfrentarse con Alexander Zverev, 21 años, el más consagrado de los jóvenes y campeón en Madrid el año pasado. Su revés a una mano fue más rápido que el de dos manos de su rival y logró desequilibrar la confianza del alemán en el cuarto juego para llevarse el primer set. Buscaba Zverev una cierta regularidad en este curso en el que ciertos problemas personales han mermado su tenis, que lo tiene y a rabiar, como demostró en un segundo parcial inapelable. Apeló al público para remontar, pero no contaba con el desperpajo de quien, con veinte años, acabó por empequeñecerlo. La pelea de juventud y alturas se la llevó el griego con un tenis más contenido y con ideas más frescas. Está en las semifinales del Mutua Madrid Open. Hace apenas un año perdió en el debut. Tsitsipas ya es una realidad.De Deportes http://bit.ly/2VVvHzA
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