Se encomiendan a Mestalla

Trepidante partido entre el Valencia y el Arsenal en el que el equipo español se marchó con una dura derrota, aunque el gol anotado por Diakhaby le concede la posibilidad de soñar con la remontada. Eso sí, necesita marcarle dos goles al Arsenal, algo que no parece imposible tras lo visto en la primera parte. Decepcionante resultado tras las expectativas generadas por los che en un inicio arrollador y en el que se pusieron por delante en el marcador. Cuando parecía que se conformaba con la mínima derrota que les concedía la vitola de favoritos para llegar a la final, llegó el gol de Oubameyang. Auténtico mazazo en el último minuto. Trató de desconcertar Marcelino García Toral a Unai Emery con un cambio de dibujo en el que reforzó su defensa. El asturiano salió al verde del Emirates con un 5-3-2 y el técnico vasco, que esperaba el clásico 4-4-2, se quedó descolocado. Pero el Valencia tuvo que pagar un peaje al cambiar su forma de juego habitual, lo que provocó numerosas dudas en la formación española a la hora de presionar o hacer coberturas. No obstante, el invento empezó funcionándole a Marcelino que vio como su equipo era un vendaval ante un Arsenal muy blando. Avisó Garay a los siete minutos rematando al cielo de Londres un balón bajo palos. La porosa defensa británica hacía aguas por todos lados, un chollo para los valencianistas, que llegaban como, cuando y por donde querían a la portería defendida por Cech. Y así, llegaba el primer gol del partido, de Diakhaby, tras una perfecta asistencia de Rodrigo. La desconfianza de la zaga local se transmitía a la grada. El run run cada vez que el Valencia recuperaba la pelota aturdía al Arsenal, que ha perdido criterio defensivo desde que se lesionara Bellerín. El Valencia había hecho lo más difícil, marcar fuera de casa, y el desarrollo del partido gestaba la sensación que la eliminatoria podía quedar sentenciada en la ida. Trámite en Mestalla. Pero si algo tiene el Arsenal es un descomunal potencial ofensivo. No necesitan nada más y lo demostraron en dos fogonazos que dieron la vuelta al marcador. Lacazette y Aubameyang empezaron a sembrar las dudas en el eje defensivo del equipo che. Desajustes en el equipo de Marcelino, al que se le ensombrecía el rostro. Y llegó el primer gol de los de Unai. Lacazette aprovechó un buen contraataque para descolocar a la defensa valencianista. El francés repetía siete minutos después aunque hay que reconocer que entre Roncaglia y Neto le facilitaron el trabajo. El defensa por dejarle rematar con facilidad y el portero porque pudo hacer mucho más en un balón que convirtió en más peligroso de lo que era. Lacazette pudo anotar el tercero si se hubiera creído el centro de Aubameyang pero, solo ante Neto, solo atinó a poner la cabeza sin que el cuero impactara con su testa. Se lo creía el Arsenal, que había estado groggy en los primeros veinte minutos. Y el propio Lacazette pudo volver a anotar. Auténtica pesadilla para Neto, que desbarató otra clarísima oportunidad del galo (min. 70). Abrumado, Marcelino movió el banquillo pero fue el Arsenal el que volvió a golpear. Clara desventaja del Valencia que se encomienda a la fuerza de su público en Mestalla. Más igualada fue la otra semifinal entre el Eintrach de Frankfurt y el Chelsea (1-1). Empezó adelantándose Jovic, demostrando los motivos por los que el Madrid quiere ficharle, pero Pedro se encargó de poner las tablas al filo del descanso. Sarri sorprendió al dejar en el banquillo a Hazard, Huguaín, Kovacic o Marcos Alonso.

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