El caos reina en las plataformas de reventa de entradas. La estrategia seguida por los clubs y la UEFA está surtiendo efecto, por lo que empresas como Stubhub y Viagogo se han visto obligadas a cancelar en masa, mediante un frio correo electrónico, los billetes vendidos para la final de la Champions, que se disputa el próximo sábado en el Wanda Metropolitano. El Tottenham fue el primer club en entregar sus entradas y el sistema elegido -junto con las amenazas de amonestaciones- ha sido todo un acierto. El optar por premiar al seguidor que más partidos ha seguido al equipo ha disminuido al máximo las opciones de que se prestaran a vender su billete a los reventas. Por su parte, el Liverpool empezó la entrega de entradas el pasado lunes, haciendo muy complicado que los brokers pudieran cumplir con sus compromisos a tiempo. Por último, la UEFA, con su estrategia de retrasar al máximo los tiempos para mandar las entradas a sus compromisos, está disminuyendo aún más la oferta, lo que hace que los billetes alcancen precios desorbitados. Viagogo, consciente del perjuicio ocasionado a los compradores que se han quedado sin entrada en el último momento, ha mandado un correo electrónico en el que informa a los perjudicados de la situación y ofrece la posibilidad de esperar por si logran conseguir una entrada a última hora y si no devolver el importe del billete que compraron al que sumarán una compensación de 2.000 dólares (o el equivalente en la moneda local) o, si prefieren, el reembolso del coste de la entrada más 3.000 dólares para gastar en entradas. Sin embargo, Stubhub, lejos de tratar de paliar las molestias ocasionadas a sus clientes, ha informado de que tan sólo devolverá el importe del billete en un plazo de 15 días, sin compensación ninguna. Por eso no se entiende que, como ya informó este periódico el lunes, la plataforma de reventa siguiese vendiendo entradas la semana pasada -y publicitándolas incluso en medios de comunicación- cuando ya eran conscientes de que sus proveedores no les entegarían muchos de los billetes ya vendidos. Ante la tormenta que se les avecina no les queda otra que seleccionar a los clientes a los cuales van a entregar las entradas que sí tienen en su poder y, mientras tanto, llamar y mandar correos electrónicos a los 'brokers' avisando de que deben cumplir con sus compromisos o se emprenderán acciones legales contra ellos. Hay que recordar que, según la UEFA, no está permitida la reventa de entradas, por lo que el asunto se complica para la plataforma.De Deportes http://bit.ly/2W0jJka






0 comentarios:
Publicar un comentario