La derrota judicial de Toño Sanchís contra Belén Esteban ha supuesto un duro varapalo para el exrepresentante, pero sobre todo para su mujer, Lorena, puesto que es ella la que figura como dueña de la empresa con la que se defraudó a la «princesa del pueblo». Tendrán que pagar casi 600.000 euros, que posiblemente hagan frente con el embargo de la casa familiar en la que vive el matrimonio con sus hijos. Sin duda este problema ha desgastado a la pareja, según publica la revista «Corazón» y parece que las cosas no son del color de rosa que pinta Sanchís. Incluso podrían estar baranjando la opción de darse un tiempo. Lorena también se ha desmarcado en la estrategia seguida por su marido. A diferencia de Toño que se ha paseado por todos los platós de televisión y ha concedido múltiples entrevistas aún criticando a Esteban, ella ha optado por agachar la cabeza y seguir la vía diplomática. Como publica «Corazón», insiste en que ella no era consciente de nada ni del desfalco económico. Va a intentar llegar a un «acuerdo tácito con la colaboradora de televisión para intentar de forma fraccionada y conseguir llegar a una entente cordial que satisfaga a ambas partes», como bien cuenta la misma publicación. Seguramente, Lorena esté pensando en el futuro de sus hijos. [Pinche aquí para leer la noticia completa]De Estilo https://ift.tt/2HLRekI
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