El DJ sueco Avicii era una presencia constante en las listas de mejores artistas de música electrónica. Tras fallecer a los 28 años en Omán, el nombre del joven se une a una lista más macabra: la de celebridades que nos dejaron demasiado pronto. Tom Bergling dejó su carrera a los 26 años, obligado por los médicos y con un precario estado de salud. En un documental grabado para Netflix, el joven confesaba no entender por qué su cuerpo no aguantaba el ritmo que mantenían otros DJ, con conciertos casi diarios en cualquier parte del mundo. Un ritmo que él mantenía gracias al consumo de ingentes cantidades de alcohol. No han sido pocos los artistas que han perecido a causa de su abuso de la bebida. A los 27 años, la privilegiada voz de Amy Winehouse se apagaba a causa de una sobredosis. La cantante británica mezcló medicamentos con el alcohol, como había hecho anteriormente Jimi Hendrix. También los barbitúricos se llevaron por delante al actor Heath Ledger cuando estaba inmerso en uno de sus trabajos más icónicos: dar vida al Joker para Christopher Nolan. La autopsia confirmaba que el intérprete había fallecido a los 28 años tras consumir oxicodona, hidrocodona, diazepam, temazepam, alprazolam y dosilamina. El fantasma de la heroína A finales del siglo XIX, Charles Wright descubría una nueva sustancia que la empresa Bayer ponía a la venta como «heroína», creyendo que era una sustituta de la morfina menos adictiva. Dos siglos después, se trata de la droga más temida y no son pocos los músicos que cayeron en sus redes. Fue el caso de Antonio Vega, cuyo deterioro físico puso de manifiesto sus problemas de dependencia. El cantante falleció a causa de un cáncer en 2009, pero otros artistas sí fallecieron de sobredosis por culpa de la droga, Janis Joplin o Sid Vicious entre ellos.De Estilo https://ift.tt/2K4nU9U
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