Hay varias cosas que solo las madres saben hacer: crear temor con una sola mirada, encontrar lo que no estabas buscando y, por supuesto, hacer que pases vergüenza. No lo hacen a propósito, pero lo hacen. Y da igual que sean una madre anónima o Kris Jenner, la todopoderosa mánager de la familia Kardashian. La matriarca acudió a la gala MET con su pareja, Corey Gamble. Fue de las primeras en llegar a la alfombra roja del evento, centrado este año en la influencia católica en la moda. «Voy a esperar a ver llegar a mis hijas. Es mi momento favorito. Quedarme arriba de las escaleras y verlas entrar», señaló Jenner ante los medios. Kris Jenner - GTRES Menos Kourtney y Khloé, el resto de la familia se encontraba allí. Kim Kardashian acudió sola, sin Kanye West. Kylie Jenner, la benjamina del clan, posó junto a su pareja, Travis Scott, mientras su hermana Kendall Jenner apareció sola, luciendo un mono blanco con escote bustier y guantes de Off-White. 😎 Una publicación compartida de Kylie (@kyliejenner) el 7 May, 2018 a las 9:55 PDT Fueron precisamente Kylie y Kendall las protagonistas de la anécodta. Mientras Kylie subía las escaleras, saludaba efusivamente a su madre. Hasta que esta sacó un teléfono móvil y comenzó a hacerle fotos. «Mamá, para», suplicó la joven. Pero todavía quedaba por llegar Kendall. Mientras posaba ante los medios, Kris se acercó a saludarla y colocar correctamente la caída de la pierna. «'¡Mamá!», gritó enfadada la joven, ante las sonrisas cómplices de los reporteros gráficos.De Estilo https://ift.tt/2IqMeEM
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