El ciclista español Carlos Coloma, medallista olímpico de bicicleta de montaña en Río de Janeiro, sufrió un lamentable incidente durante la Copa Internacional de Cataluña hace dos días, celebrada en Bañolas (Gerona). Durante el transcurso de la competición, una persona le colocó una bandera estelada en la cara, como si fuera un capote, mientras en la otra mano llevaba un palo a modo de banderilla. Esto provocó la caída del ciclista. En unas declaraciones a EFE, el riojano ha calificado el suceso de «bochornoso» y como una «vergüenza». «En el momento ni me di cuenta de la situación», ha asegurado. Además, Coloma ha reprochado la «cobardía» de la persona que protagonizó el incidente porque, según sus datos, «él o amigos suyos son quienes han publicado la foto en redes sociales y se han preocupado de que no se le vea la cara». En cualquier caso, ha subrayado que «la prueba de Banyoles es probablemente la mejor que hay en España, con corredores de todo el mundo y un 99,9 por ciento de espectadores que se dedican solo a animar» y «para mí, es mi segunda casa». Eso sí, ha lamentado que «haya quien mezcla deporte y política», pero ha recalcado que «es muy poca gente y, cuando se dan situaciones como esta, lo que más rabia da es que no respetan ni el sacrificio de los corredores, ni su seguridad, ni el espectáculo que tratamos de dar». Coloma ha indicado que se siente «de Albelda -su localidad natal-, de La Rioja y de España» y que está «orgulloso de ello» y, «luego, cada cual tiene derecho a tener sus propios sentimientos, como todos los amigos catalanes que yo tengo, cada cual con su propia opinión». «Pero lo que no tiene sentido y es una vergüenza es no respetar a los deportistas y mezclar cosas que no tienen que mezclarse», ha afirmado.
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