
La policía de Las Vegas ha emitido una orden dirigida a un juez italiano en la que solicita una prueba de ADN de Cristiano Ronaldo para cotejarlo con los restos biológicos encontrados en la ropa de Kathryn Mayorga, la estadounidense que lo acusa de supuesta violación. El caso da así un giro de 180 grados y se pone realmente serio para el jugador de la Juventus. Es, precisamente, el hecho de que el delantero resida hoy en Turín lo que motiva el envío del requerimiento a un tribunal italiano. Fue el prestigioso diario estadounidense «The Wall Street Journal» el que avanzó la petición realizada desde Estados Unidos ya que la presunta agresión sexual aconteció en la ciudad del Estado de Nevada allá por 2009. Lo que está claro es que CR7 no se va a poder librar de realizar semejante prueba, antesala para que la investigación tome un nuevo rumbo. La Justicia norteamericana debe aguardar ahora a que el juez italiano adopte una decisión al respecto y otorgue su autorización. Cuando se recoja el ADN de Ronaldo, ha de enviarse a Las Vegas y entonces comenzarán las decisivas tareas comparativas. Las últimas revelaciones acerca del caso han acelerado llegar al momento actual, ya que el semanario alemán «Der Spiegel» destapó detalles íntimos que tal vez podrían poner en aprietos al cinco veces ganador del Balón de Oro. Eran palabras comprometedoras pronunciadas por el propio jugador, del estilo: «Me dijo que no, pero luego me agarró el pene» o «No utilizamos lubricante, usé mi saliva». Esos eran los términos de la declaración de CR7 en 2009, que ahora se pueden volver en su contra puesto que Mayorga se encargó de poner los documentos en manos del Tribunal de Las Vegas competente en este escabroso asunto. No trascendió en qué contexto tuvo acceso Kathryn a la conversación de Ronaldo con sus abogados, pero lo cierto es que se trataba de un cuestionario que su despacho de abogados le dirigió al ex delantero del Real Madrid, aunque en su momento el tema llegó a solventarse de manera extrajudicial previo pago de 375.000 euros a la mujer en cuestión. Cristiano aparece citado como Señor X en esos documentos, que testimonian cómo acontecieron los hechos: «Ella dijo que no quería, pero se puso a mi disposición. Se lo hice de lado en la cama y la penetré por detrás. Fue duro. No cambiamos de posición. Cinco o siete minutos. Tal vez ella tuvo algunos moratones cuando la agarré. Ella me dijo: “Eres estúpido, imbécil, me obligaste. Y yo me disculpé después"». En consecuencia, se reflejan ahí varias referencias al hecho clave: que la relación sexual existió y que Kathryn Mayorga mostró en varias ocasiones su presunto rechazo a las pretensiones expresadas por el futbolista madeirense. El entorno del jugador luso reconoce que él está seriamente preocupado por el cariz de los acontecimientos y que sabe perfectamente que la batalla judicial no ha hecho más que arrancar, por lo cual ha doblado esfuerzos contratando a un famoso abogado de Nevada, David Chestnutt.
De Estilo http://bit.ly/2RO5Ast
0 comentarios:
Publicar un comentario