La palabra anabolizantes es comúnmente conocida. Quién no piensa en ella cuando ve un campeonato de culturismo o incluso conoce a gente que se los inyecta. Pero el acrónimo SARM sólo se maneja en los circuitos de gimnasio. Y lo que es peor, entre los chavales jóvenes que entrenan, los veinteañeros. La Guardia Civil y la Policía Nacional tienen su foco puesto en esta nueva y casi desconcida generación de anabólicos, que, a diferencia de los tradicionales, no son esteroideos y no se pinchan ni se toman en pastillas, sino que se ingieren en gotas, mediante un dosificador. La Unidad Central Operativa ( UCO ) acaba de explotar una de las primeras operaciones contra estos impulsores de la masa muscular y de la pérdida dramática de grasa, a grandes rasgos, los dos ciclos de entrenamiento que eligen, según la época del año, los aficionados al 'fitness'. Volumen, para el invierno, y definición de cara al verano, por lo que ahora, después de Semana Santa, es cuando empiezan en este segundo modo de entreno. El capital de la Sección de Salud Pública y Dopaje de la UCO es una biblia de este asunto. «Son moléculas que empiezan a desarrollarse como medicamentos en laboratorios legales. Algunas entran en fase de prueba hasta que se comercializan. Hay varios tipos, sobre todo para gente que tiene cáncer y pierde masa muscular; para la obesidad (son potentes quemagrasas); crecepelo… Pero, debido a sus efectos secundarios, no pasan de la fase de experimentación aún. Sólo hay uno que se encuentra en la primera fase, y aún le quedan varias más para llegar al ensayo clínico «, explica el oficial. Noticia Relacionada estandar No Desmantelado en Chamberí un laboratorio dedicado a la fabricación de anabolizantes e incautados 178.800 euros EP Los agentes han intervenido 9.300 kilos de principio activo, 200 viales, frascos y ampollas y dos rifles En las aprehensiones que están llevándose a cabo, los alijos se envían a la Agencia Española del Medicamento (AEM), a la Agencia Antidopaje o a universidades. En el caso de los SARM, el informe de la AEM es demoledor: «Medicamentos en experimentación, prohibida su distribución en España». Porque, aunque se promocionen como anabolizantes sin efectos secundarios o muy bajos, la realidad es muy diferente. «Son selectores de receptores de andrógenos, de ahí sus siglas. Un anabolizante esteroideo clásico hace crecer el músculo, pero, si tienes un tumor y no lo sabes, también crece. En cambio, con los SARM, al ser selectores se intenta que sólo vayan a los receptores del músculo esquelético. Si los usas con una dosis terapéutica, los efectos secundarios se verían reducidos. El peor problema es que, cuando su utilización salta al deporte, se ingieren dosis supraterapéuticas, y al final llegan esos problemas hepáticos, en el bazo o en el riñón, hasta provocar la muerte». Venta 'online' De ahí el engaño masivo que está produciéndose, sobre todo en chavales jóvenes, que por un lado los ven más atractivos que los esteroides porque los SARM se toman en goteo y no mediante inyecciones intramusculares. «El hombre de gimnasio que lleva media vida entrenando y tiene 40 años y se ha ciclado ya está acostumbrado a pincharse. Pero los más jóvenes no. Además, estos anabolizantes se venden 'online', en páginas web, pero también a través de redes sociales, un caldo de cultivo para los chicos, sobre todo en Facebook, Instagram y YouTube «, analiza el capitán de la UCO. Hay un problema añadido, y es que no hay una unificación de criterios a nivel europeo ni mundial. Por ejemplo, en EE.UU., su venta no es ilícita. Y varios laboratorios chinos han logrado incluso premios internacionales en la creación de estas moléculas. En España están totalmente prohibidos. «Quienes los distribuyen saben que los jóvenes beben de las redes sociales. Es lo que hacía IberoSarm, una de las dos grandes empresas que se reparten el negocio [casi un monopolio], el negocio que acabamos de desmantelar. Además, el desastre llega cuando los consumen como pilas, que son las mezclas de varios de estos fármacos ilegales y el organismo comienza a quejarse», añade el experto. El líder, un universitario Madrid es uno de los kilómetros 0 de la distribución de estos nuevos anabolizantes: «Las redes subcontratan cada servicio. El puerto seco de Coslada es uno de los principales lugares donde son enviados paquetes y paquetes para su 'picking'. Estas organizaciones no pueden hacerlo todo en sus casas, sino que necesitan una nave y logística para almacenar tantísimo producto, y por eso contratan a estas empresas legales, que luego los empaquetan y envían a los clientes a cualquier punto«. Desde hace cuatro años, había dos marcas que estaban reventando el negocio: la recién desmantelada IberoSarm, cuya página acaba de cerrar la UCO, y NG Labs, que sigue operativa. En el caso primero, el cerebro era un chaval de apenas 26 años, con estudios de marketing y dirección de empresas, de una familia normal, pero que utilizaba una empresa legal de nutrición para el verdadero negocio de estas drogas para culturistas. Tenía a diez empleados, entre publicistas, informáticos y hasta una economista. «Le hemos seguido desde que vivía con sus padres y luego le vimos emanciparse, aunque no le iban los lujos: ganó 1,7 millones sólo en el último año pero conducía un Peugeot 309 y vivía de alquiler en un barrio muy normal», indican en el Instituto Armado. Otro de los detenidos fue también el encargado de publicidad, el 'influencer' Ron Montana , «que tan pronto explica en un vídeo cómo ligar con una mujer adinerada a otro en el que hace un tutorial para mezclar hormonas de crecimiento». Suelen ofrecer cupones de descuento o incluso de fidelización, puesto que, al ser dos empresas casi en un oligopolio, «se tiraban los trastos en internet», con promociones agresivas y campañas de desprestigio. Sólo hay que echar un vistazo a YouTube, donde abundan esos vídeos. La cadena de producción es la siguiente: «Ellos buscan un fabricante en un país con una legislación laxa: Bulgaria, Turquía, China… Allí compran el principio activo y llega a España, en polvo; la ruta desde el gigante asiático es primero en avión hasta uno de los grandes 'hubs' europeos, como Alemania o Francia, y arriban a España vía terrestre. Aquí compran miles de litros de disolventes para hacerlos líquidos. Todo lo que viene tiene una pureza mínima del 98%, son SARM puros», insisten fuentes policiales. Perpetran las mezclas en laboratorios, donde las envasan y conforman los goteros, y de ahí acaban en los mencionados centros de distribución. IberoSarm sacaba la brutalidad de 80 paquetes diarios. En la operación se ha detenido a cinco personas, más otros seis investigados. Están acusados de tráfico de medicamentos y organización criminal. «El consumo de SARM iba a explosionar. Al realizar esta operación, hemos evitado que pronto los SARM superaran a los anabolizantes esteroideos, en un porcentaje del 70%-30%», añade el mando de la UCO. Laboratorio clandestino Madrid capital escondía, hasta hace muy poco, el primer laboratorio de elaboración de SARM. Ha sido desarticulado en una operación conjunta entre la Policía Nacional y la Municipal. En el registro llevado a cabo en la ciudad se intervinieron 9.300 kilogramos de principio activo, 200 viales, frascos y ampollas con producto terminado, 500 botes y dispensadores goteros, material de laboratorio, dos armas largas de fuego y 178.800 euros en efectivo, entre otros enseres. Las primeras pesquisas tuvieron lugar cuando los agentes recibieron diversas informaciones acerca de la existencia de un posible laboratorio clandestino de medicamentos ubicado en Madrid. Con todos estos datos, los investigadores iniciaron las primeras pesquisas hasta lograr identificar al principal responsable, dueño del laboratorio. Fuentes policiales precisan que estaba vinculado con varios gimnasios especializaos en la preparación de personas que compiten en el mundo del fisioculturismo. De forma paralela, los agentes se pusieron en contacto con la Agencia Española del Medicamento y Productos Sanitarios, al objeto de tener conocimiento de la tipología de medicamentos que se estaban fabricando. «Tras el análisis pertinente la Agencia indicó que se trataba de un tipo de producto de nueva creación denominado SARM; medicamento del que aún no se tenía mucho conocimiento en Europa y cuyo consumo genera un grave daño para la salud, máxime al tratarse de un laboratorio clandestino en un domicilio particular del padre del detenido y sin ningún tipo de autorización, ni medida sanitaria», precisan.
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