El incierto futuro de Sergio Rodríguez

Mirotic e Ibaka no fueron los únicos que expresaron al seleccionador su negativa a ser convocados con la selección. También lo hizo Sergio Rodríguez, que después de ocho veranos participando con España en todos los grandes campeonatos le pidió al técnico un descanso. En su caso, no se trata de fatiga o falta de motivación. Ni siquiera un compromiso adquirido con su club, pues el canario no tiene aún decidido dónde jugará la próxima temporada. De hecho, esa ha sido la principal razón para su renuncia. El «Chacho» se desvinculó ayer del CSKA y estudia volver a España, donde tiene ofertas del Unicaja, el Valencia Basket y el Baskonia. El Real Madrid, que era su destino preferido, no ha podido hacerle hueco. De hecho, los blancos confirmaron ayer el fichaje de Laprovittola –MVP de la pasada ACB–, lo que hace casi imposible la llegada del canario. Solo si Campazzo decide dar el salto a la NBA, el Madrid se plantearía su llegada. Algo bastante complicado, pues el base argentino tiene ultimada ya su renovación por tres temporadas. Con ese panorama, Rodríguez estudia estos días las ofertas que tiene sobre la mesa y no tardará en decidir, porque quiere zanjar de una vez por todas una cuestión que lleva semanas atormentándole. «Ha sido una decisión dura y complicada, porque jugar con la selección y representar a mi país ha sido una prioridad emocionante durante estos 15 años. Tenía que ser honesto con todos y esta vez no creo que esté en condiciones plenas de ayudar al equipo nacional en este reto del Mundial de China», explicó el canario en su comunicado. Es la primera vez que el base renuncia a la selección desde que debutó en el Mundial de Japón 2006 con 19 años. En total, ha ganado siete medallas con España, el oro de aquella Copa del Mundo, dos en los Juegos Olímpicos y cuatro en los Eurobasket que ha disputado.

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